PÚBLICO/ DANILO ALBIN. Las misas de homenaje a Franco se han mantenido en «reserva» para tratar de evitar cancelaciones, como ocurrió a última hora en Sevilla. Esta semana habrá nuevos actos de apología franquista en Madrid y Huesca.
José Luis Roberto se siente ya algo «clandestino». El líder de España 2000, una formación política que se autodefine como «fascista» y que ofrece cursos de «autodefensa» a sus militantes más jóvenes, no quiso que se hicieran fotos del último acto de su partido en un restaurante de València. Allí celebraron y aplaudieron, sin cámaras, el golpe de Estado franquista de 1936.
«Las cosas se pueden poner mal», dijo Roberto en un momento de su discurso, pronunciado el pasado viernes. Fue el puntapié inicial de los actos de apología franquista, principalmente en recintos privados o iglesias, que se han celebrado durante las últimas 72 horas en España para reivindicar el 18 de julio.
«Si sacamos foto será de espaldas, porque nos tendremos que acostumbrar a trabajar en la resistencia«, explicó el líder de España 2000 a sus seguidores durante una cena celebrada en un restaurante valenciano. Las redes oficiales del partido se han limitado a difundir un video con su discurso en el que no se aprecia ni un milímetro del salón.
Roberto le tiene miedo a la Ley de Memoria Democrática, recién aprobada por el Congreso y aún pendiente de su paso por el Senado y posterior publicación en el Boletín Oficial del Estado para que entre en vigor. Todo eso no tardará en ocurrir, de forma que el jefe de esta formación ultraderechista lo tiene claro: «Lo que estamos haciendo hoy aquí el año que viene no lo podremos hacer», afirmó.
Pese a no estar aún en vigor, la Ley de Memoria Democrática ha impregnado de una u otra forma los distintos actos franquistas celebrados durante estos últimos días para conmemorar el golpe de Estado de 1936. En el Arco de la Victoria de Moncloa, el Movimiento Católico Español (MCE) aprovechó su tradicional homenaje a Franco en plena vía pública para acusar al gobierno de «actuar en sintonía con el del Frente Popular en 1936, con los mismos partidos que entonces».
El líder del MCE es José Luis Corral, un veterano militante franquista que se esmera en montar sus actos, por pequeños que sean, con el mayor número de banderas o uniformes posibles. «Nosotros nos limitamos a consignar lo que pasó, a glorificar a determinados personajes, pero no hay un insulto, agresión o ataque a las personas del otro bando. No lo hubo nunca», dice a Público.
Antes de montar la escenografía franquista en el Arco de la Victoria, Corral y sus seguidores rezaron en el Valle de los Caídos. Tal como habían anunciado en sus carteles, se hicieron presentes en la misa para de esa manera homenajear también a Franco en la víspera del 18 de julio. «Lo hicimos el domingo porque el lunes el Valle está cerrado«, explica en una conversación telefónica.
Misa con el Obispo auxiliar
La misa en la Basílica del Valle de los Caídos fue presidida por el Obispo auxiliar de Madrid, Juan Antonio Martínez Camino. «Su presencia en el Valle se interpreta como muy significativa en apoyo del lugar y de los monjes y escolanos, así como de los muchos fieles y de los familiares de los miles de sepultados en este lugar, ahora que se agudiza la perversa intención del gobierno frentepopulista y sus socios separatistas de profanar del todo este sitio y transformarlo radicalmente, o cerrarlo, o destruirlo», sostiene el MCE.
A raíz de una consulta realizada por Público, fuentes de la Archidiócesis de Madrid señalaron que Martínez Camino «estuvo el pasado fin de semana en la Hospedería del Valle de los Caídos» con motivo del XVIII Encuentro Nacional de Jóvenes Adoradores, «en el que pronunció una conferencia sobre san Rafael Arnaiz, una figura de la que es experto».
¿Por qué se prestó para dar esa misa en la víspera del 18 de julio? Según el Obispado, «en el marco de las jornadas le pidieron que el domingo presidiera la Misa conventual en la basílica y así lo hizo», sin que hubiese «referencia política alguna porque los templos no son lugar para actos de este tipo».
En esta ocasión, los grupos ultraderechistas han optado por no dar a conocer listados de misas en las que se conmemoraría el aniversario del golpe franquista. «Se han hecho misas de carácter algo privado; algunos prefieren hacerlas con reserva», explica Corral. De hecho, este lunes estaban previstas algunas celebraciones litúrgicas en Barcelona y Cartagena.
En Sevilla, la Iglesia de San Alberto que dirigen los Padres Filipenses impidió que Comunión Tradicionalista Carlista se hiciera presente en el templo para homenajear el «alzamiento nacional», tal como habían previsto en su agenda. La noticia de Público sobre este evento provocó la suspensión del acto por parte de los responsables del templo, un gesto que enfadó a los carlistas.
Acto franquista en Málaga
La delegación de la Fundación Nacional Francisco Franco (FNFF) en Málaga optó por celebrar el 18 de julio con una «comida de hermandad» en un local privado, prácticamente sin publicidad previa. El encuentro de los franquistas malagueños tuvo lugar en la Peña El Sombrero de esta ciudad, donde contaron con la presencia de Jaime Alonso, vicepresidente de la FNFF.
Allí también estuvo presente el sacerdote José Diéguez, quien suele participar en los actos organizados por la fundación franquista en territorio malagueño. El discurso central corrió a cargo de Alonso, que reivindicó el papel de la FNFF en la «preservación y defensa de la gestión del caudillo Francisco Franco y de su legado histórico».
Mientras tanto, el presidente de dicha fundación, el militar retirado Juan Chicharro Ortega, arremetía en un artículo publicado en ‘El Correo de España’ contra «los intentos de dividir y enfrentar a los españoles que el Gobierno socialista/comunista/secesionista actual, en connivencia con ETA, está llevando a cabo a través de la previsible Ley de Memoria Democrática que entrará en vigor en breve».