Faro de Vigo.- Dos policías resultaron heridos en unos incidentes ocurridos fuera y dentro del estadio.
Agentes de la Policía Nacional han detenido a tres personas por su presunta participación en diferentes delitos de atentado a agentes de la autoridad y desórdenes públicos ocurridos en el marco del partido del play off de ascenso a Segunda celebrado el domingo en el estadio de Balaídos.
Según informan este miércoles fuentes oficiales, los hechos tuvieron lugar el día 5 en Vigo, donde se iba a disputar la semifinal de la fase de ascenso a Segunda División entre el Racing de Ferrol y el Nàstic de Tarragona. Por ese motivo, se estableció un dispositivo con la finalidad de garantizar la seguridad y el orden público en dicho evento.
Hora previas a la celebración del partido, explica la Policía Nacional, aficionados del Nástic de Tarragona, se desplazaron a bares frecuentados por los seguidores locales más radicales, donde se unieron a ellos.
Según investigaciones previas, se tenía conocimiento de antecedentes de enemistad entre aficionados radicales locales y del Racing de Ferrol, por ello el dispositivo de seguridad contemplaba el acompañamiento en todo momento de los aficionados del club gallego, desde las afueras de la ciudad hasta el estadio de Balaídos.
En el momento en que confluyeron ambas aficiones se produjeron altercados que fueron contenidos rápidamente por agentes de la Policía Nacional. Varios funcionarios recibieron empujones, patadas, puñetazos, lanzamiento de objetos como botellas de cristal y piedras. Muchas de ellas impactaron contra los policías y contra diversos vehículos estacionados en las inmediaciones del estadio. También en el interior de Balaídos, durante la celebración del partido, se produjo un nuevo enfrentamiento que fue rápidamente atajado por los agentes de la Policía Nacional.
En relación a estos hechos, los agentes procedieron a la identificación y detención de tres personas, que fueron trasladas a dependencias policiales. Además, dos agentes resultaron heridos y fueron atendidos en un centro médico de la ciudad.
Como consecuencia de dichos incidentes, varias de estas personas han sido propuestas para sanción por la Ley 19/2007, del 11 de julio, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte, y por la Ley 4/2015, del 30 de marzo, de protección de la seguridad ciudadana. Estas sanciones podrían conllevar multas de entre 3.000 y 6.000 Euros y/o la prohibición de entrada a recintos deportivos de seis meses a un año.