El Español.– Tras dos años escuchando sus conversaciones telefónicas, leyendo los mensajes de sus canales internos, habían acumulado material suficiente para constatar las intenciones del grupo. Tenían las cosas claras: «Hay que limpiar este país», repetían una y otra vez. Tenían entre 50 y 60 años, la mayoría sin empleo u oficio. Su tiempo lo dedicaban en gran medida a verter su odio hacia el colectivo LGTBI, hacia los extranjeros, toda clase de extranjeros, y a planificar toda clase de acciones violentas.
Dos años después de comenzar a investigarles, la Policía Nacional ha desarticulado esta organización de ideología supremacista nazi cuyos integrantes estaban agrupados en distintas células repartidas por todo el país con el objetivo de perpetrar diversos ataques y así «subvertir el orden constitucional».
Una de esas acciones llegaron a consumarla el pasado mes de octubre de 2021. Ocurrió cuando asaltaron la sede del colectivo LGTBI de Alcoy (Alicante). Allí quemaron la bandera con los colores del Orgullo y parte de las escaleras de acceso a las oficinas.
Al día siguiente, en la puerta de la sede aparecieron una serie de fotocopias u octavillas del tamaño de una tarjeta con el dibujo del águila nazi sosteniendo el yugo y las flechas, simbología ensalzada durante la dictadura franquista. Una frase remataba las cuartillas: «Contra el separatismo y sus cómplices».
En total han sido detenidas siete personas. A cuatro sede ellos se les arrestó en Barcelona. Otro más en Torrejón de Ardoz. Dos más en Alcoy y Onteniente (Alicante). Se les investiga por su participación en delitos de odio, tenencia ilícita de armas, injurias a las Instituciones del Estado y pertenencia a grupo criminal.
Ni siquiera cuando fueron arrestados por los agentes dejaban de repetir las consignas neonazis que habían cacareado durante años mientras los investigadores les escuchaban al otro lado de la línea: «Lo que no queremos es que esta gente esté en nuestro país». Todos ellos conformaban un grupo cohesionado, cohesionado a través de las redes sociales. Su fin era la incitación al odio y a la violencia extrema contra colectivos toda classe de colectivos, a quienes consideraban sus rivales, sus adversarios y sus enemigos.
«Extrema hostilidad»
Tras las oportunas indagaciones, los agentes comprobaron como el grupo se dedicaba a la difusión de mensajes de odio de extrema hostilidad, e incitadores de violencia hacia otros colectivos antagónicos y vulnerables. Los investigadores averiguaron que en esos canales, en su mayoría en Telegram, agrupaban a un nutrido grupo de personas, a las cuales proporcionaban de manera constante esa clase de contenido supremacista.
Las referencias a Hitler resultaban constantes en su discurso. También, aseguran a EL ESPAÑOL los investigadores, apuntaban hacia los judíos.
Los arrestados actuaban a través de ese servicio de mensajería instantánea, pero también en las redes sociales y en foros. Allí propagaban sus soflamas neonazi, siempre de forma anónima. Sus mensajes más directos iban dirigidos y filtrados hacia sujetos de un perfil acorde a sus postulados ideológicos radicales. Estos perfiles y blogs ya han sido bloqueados.
Inicio de la investigación
Durante los registros, realizados de forma simultánea, los agentes intervinieron un revólver, tres carabinas, armas de fuego simuladas, munición, armas blancas, bates de béisbol. Incluso hallaron entre las pertenencias de uno de ellos manuales de fabricación de explosivos. Además se ha incautado variado material de carácter supremacista -como indumentaria y documentación de ideología nazi- y numerosos dispositivos electrónicos.
La investigación se inició, en el primer trimestre de 2020, tras la recepción de una denuncia anónima a través del portal web de colaboración ciudadana de la Policía Nacional https://www.policia.es/_es/colabora_informar.php, en la que se alertaba sobre la creación de un foro con ideología de ultraderecha radical y violenta.
Tras las oportunas indagaciones, los agentes comprobaron como el grupo se dedicaba a la difusión de mensajes de odio de extrema hostilidad, e incitadores de violencia hacia otros colectivos antagónicos y vulnerables.
Esta compleja operación fue ejecutada el pasado martes por la Comisaría General de Información en colaboración con las Brigadas Provinciales de Información de Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante y Tenerife y la Brigada Local de Información de Torrejón de Ardoz (Madrid).