Levante.- La Ciutat de la Justicia de València acogerá el próximo miércoles 12 de enero un juicio contra varios neonazis que amenazaron de muerte a Fran Pardo, un activista LGTBI, por Twitter. Los hechos se remontan a los años 2013, 14 y 15, cuando el denunciante tenía entre 17 y 18 años de edad. Varias personas de ideología ultraderechista se sentarán en el banquillo después de escribirle amenazas de muerte. Han podido identificar a varias personas, pero no a todas, ya que denunció más de 20 tuits.
Los ejemplos no dejan lugar a dudas. «Voy a hacer uso de mi libertad de expresión. Te voy a pegar cuatro tiros y el remate final en la cabeza», «Eres un caramelito, en serio. Ojalá pillarte y darte lo que te mereces. No me refiero al sexo enfermo», «Saco la pipa o a puñetazos», «Me gustaría que reventaras, hijo de puta», son algunos de los mensajes intimidantes que recibió Pardo, algunos con faltas de ortografía incluidas.
Tras dos aplazamientos, la causa será dirimida en los juzgados si todo va según lo previsto. Han sido siete años de espera, siete años en los que Pardo ha vivido con el miedo constante a que las amenazas se pudiesen cumplir: «Tenía miedo de cruzarme por la calle a alguna de esas personas anónimas y que me pudiesen reconocer. He renunciado a parte de mi libertad para intentar preservar una sensación de seguridad. Y todo por su miedo irracional», comenta el afectado.
«Con el tema de internet es muy complicado rastrear pero según para quien, cuando haces chistes parece que no es tan complicada la cosa. Animo a la gente a que denuncie y haga ruido para visibilizar la impunidad que sigue habiendo. Si te llegan amenazas denuncia, por favor«, expone.
«Cuando yo tenía unos 17 años empezaron las amenazas, las denuncié con 18 años, en 2015. No las denuncié antes porque era menor de edad y no quería hacerlo para que no se enteraran mis padres. Según iba ganando más seguidores las amenazas iban a más y empezaban a ser menos anecdóticas y más preocupantes», argumenta pardo.