El Mundo.– El asesinato del diputado conservador británico David Amess, de 69 años, este viernes en la localidad de Leigh-on-Sea ha sido considerado como un incidente terrorista, informó la madrugada de este sábado la Policía Metropolitana de Londres.
«El asesinato de David Amess en Essex el día de hoy ha sido declarado como un incidente terrorista, y el Comando Contra el Terrorismo del Met dirigirá la investigación», anunció Scotland Yard en un comunicado en Twitter.
La muerte por apuñalamiento del veterano diputado conservador David Amess ha causado una profunda conmoción en el Reino Unido. Superviviente de la era Thatcher y férreo defensor del Brexit, Amess murió asesinado a los 69 años por un joven de 25, a la salida de un acto político en la iglesia metodista de Leigh-on-Swea, al este de Londres, ante los ojos atónitos de decenas de simpatizantes.
La unidad antiterrorista se hizo cargo de la investigación y durante la madrugada emitió un comunicado en el que calificaba el suceso como «incidente terrorista». «El apuñalamiento fatal en Leigh-on-Sea ha sido declarado como un incidente terrorista. La investigación inicial ha revelado una posible motivación vinculada al extremismo islamista», señaló la policía.
Como parte de la investigación, los oficiales están realizando búsquedas en dos direcciones en el área de Londres y están en curso, según la Policía.
«Se cree que actuó solo y no buscamos a nadie más en relación con el incidente en este momento. Sin embargo, continúan las investigaciones sobre las circunstancias», informa la nota policial.
El brutal ataque ha provocado la consternación de la clase política. Amess es el segundo diputado que muere asesinado en la era del Brexit, más de cinco años después del atentado que causó la muerte a tiros de la laborista Jo Cox, en la antesala del referéndum de la UE del 2016.
Fuentes policiales informaron de que el autor se trata de un joven británico de 25 años de origen somalí. La secretaria de Interior, Priti Patel, condenó el asesinato de Amess como «un ataque contra la democracia» y ordenó una revisión a fondo de la seguridad de los diputados, en colaboración con el presidente de la Cámara de los Comunes.
Siete miembros de la Cámara de los Comunes han muerto en las últimas cuatro décadas en ataques violentos, tres de ellos (Ian Gow, Anthony Berry y Robert Bradford) en la época virulenta del IRA entre los años ochenta y noventa. Desde el 2016 hasta el 2020, y en medio de la creciente polarización de la política británica, la policía contabilizó hasta 678 delitos cometidos contra diputados de todos los partidos políticos.
La muerte de David Amess provocó una lluvia de solidaridad en las redes con la familia del que era padre de cinco hijos, conocido por sus férreas convicciones en ala dura del partido, pero también por su amor por los animales.
«Nuestros corazones están llenos de conmoción y tristeza», declaró el «premier» Boris Johnson. «Era una de las personas más amables, buenas y gentiles en la política, con un historial de leyes a favor de los más vulnerables, desde la gente que padece endometriosis a los que sufren pobreza energética, pasando por el fin de la crueldad hacia los animales».
«Absolutamente devastadoras las noticias sobre Sir David Amess», escribió por su parte en Twitter Carrie Johnson. «Un amante de los animales y un auténtico caballero. Esto es completamente injusto. Mis pensamientos están con su mujer y sus hijos».
La clase política rindió tributo al veterano diputado, que entró en Westminster en 1983 con la ola de Margaret Thatcher y había revalidado su puesto en el 2019 con 14.000 votos de diferencia. «David era un verdadero parlamentario, que perdió su vida sirviendo a sus electores y trabajando por ellos», declaró el secretario de Transportes Grant Shapps.
El laborista Lindsay Hoyle, presidente de la Cámara de los Comunes, expresó su «consternación y dolor» por la muerte de Ammes: «David era un hombre adorable, devoto de su familia y del Parlamento. Todo el mundo le quería aquí. Durante las casi cuatro décadas que estuvo con nosotros se ganó una reputación por su amabilidad y su generosidad».
Brendan Cox, el marido de Jo Cox, escribió también un sentido homenaje en Twitter: «Mis pensamientos están con la familia de David, eso es todo lo que importa ahora. Lo sucedido vuelve a traer todo de vuelta: la pérdida y el dolor, pero también el amor que recibimos tras la muerte de Jo. Algo así no puede volver a ocurrir».
Curiosamente, el propio David Amess llegó a escribir una reflexión tras la muerte de Jo Cox: «Ella era un mujer joven con familia que cumplió con su deber, como todos hacemos, completamente inconsciente de la amenaza a la que hacía frente. Se suele decir que algo bueno ocurre siempre tras la muerte de alguien, pero es difícil saber qué de bueno se puede sacar de un asesinato sin sentido como este».
El propio Amess llegó a reconocer que había recibido amenazas en el pasado y que tuvo que recurrir a una vigilancia especial en su hogar, pero defendiendo su derecho a seguir en contacto directo con los votantes. Se desconoce si había recibido amenazas recientemente, o a partir de decisiones críticas como su voto en contra del matrimonio gay y su apoyo al Brexit duro y a la campaña ‘Leave Means Leave’.
El ataque ha traído a la reciente memoria de los británicos la muerte a tiros de Jo Cox en junio del 2016 y días antes del referéndum. Cox fue asesinada por un militante de ultraderecha Thomas Mair, que proclamó durante el juicio como «Muerte a los Traidores y Libertad para Gran Bretaña». Mair fue condenado a cadena perpetua.
La unidad antiterrorista de la policía se ha hecho cargo de la investigación por el asesinato de David Amess, aunque de momento no ha trascendido información sobre un posible móvil político o terrorista. El asesino de 25 años fue detenido inmediatamente en el lugar de los hechos con el cuchillo aún en la mano. La policía ha facilitado tan solo su edad, pero no ha revelado su nombre ni ha ofrecido más detalles.
El ataque se produjo en la iglesia metodista de Belfairs al mediodía de este viernes, durante un acto político local del veterano diputado por Essex, anunciado profusamente en las redes y sin apenas vigilancia policial. Amess, conocido por su cercanía con los electores, estaba confraternizando con varios simpatizantes a la salida del acto cuando se produjo la agresión.
«Alguien ha sido apuñalado y no respira», fue la llamada que se recibió en el acto en el 999. Amess fue atendido de «puñaladas múltiples» en plena calle por un equipo de médicos y paramédicos. Se desconoce si la ambulancia no llegó a tiempo o por qué no fue traslado urgentemente a un hospital. La policía de Essex confirmó su muerte al cabo de tres horas del ataque.
El concejal John Lamb, que estaba cerca de la escena, despidió entre lágrimas al diputado alegando que siempre fue «un amigable hombre de familia». Judith Cannon, vicepresidenta del club conservador local, no pudo ocultar su espanto ante lo ocurrido: «No entiendo cómo nadie ha podido ser tan retorcido como para causar daño a un hombre tan amable como David».
