La Razón.- El danés Morten Baldur Karrebæk Pust huyó de su país natal tras participar en el brutal atraco contra una joven de 25 años en el Año Nuevo de 2020 y permanecía oculto en Reino Unido
Uno de los neonazis “más violentos” de Europa fugitivo de la justicia apareció muerto en su casa de Reino Unido el pasado mes de septiembre. El danés Morten Baldur Karrebæk Pust estaba en busca y captura en su país natal por el brutal robo de una mujer de 25 años, a quien golpearon en la cabeza con el mango de un hacha mientras le tapaban la boca con cinta adhesiva.
Pust, con tatuajes en todo el cuerpo, huyó a Reino Unido después de su presunta participación en el salvaje asalto ocurrido en el suburbio de Hvidovre en Copenhague el día de Año Nuevo en 2020. Finalmente la Policía lo encontró muerto en su casa de Anfield en Liverpool el pasado 19 de septiembre, según ha informado el tribunal forense. La causa de la muerte fue el suicido, según ha avanzado el periódico “Liverpool Echo”.
Historial agresivo
El conocido como el neonazi “más violento” de Europa mostró su agresividad desde una edad temprana. En su largo historial delictivo se encuentra el ataque deliberado contra un niño de 11 años de otro origen étnico y el intento de incendio de una escuela.
También estuvo vinculado a un ataque con cócteles molotov contra un quiosco en 1994 y se introdujo en la escena neonazi en Dinamarca. El grupo de investigación de izquierda Redox lo describió como “uno de los nazis más violentos de Dinamarca”.
Asimismo, Pust había sido cantante principal de la primera banda neonazi de Dinamarca, Chamber 88.
