El presidente declara el 1 de noviembre «Día Conmemorativo de los Estadounidenses Asesinados por Extranjeros Ilegales”
AMANDA MARS. EL PAÍS.- A tres días de las elecciones y con las encuestas en contra, Donald Trump ha echado gasolina a su discurso xenófobo y declarado el 1 de noviembre como el “Día de Conmemoración de los Estadounidenses Asesinados por Extranjeros Ilegales”. El presidente firmó la proclamación este viernes por la noche con la promesa de “no descansar” hasta que la frontera esté “completamente segura” y garantizar que la construcción del polémico muro con México va viento en popa. “Vamos a proteger a nuestras familias de aquellos que buscan hacernos daño”, recalcó en su escrito.
Ni el Día de los Muertos ni el Día de Todos los Santos. Para formar parte de esa conmemoración que ha creado Trump, el ciudadano asesinado debe ser de nacionalidad estadounidense y no vale un homicida cualquiera, el ejecutor debe ser extranjero pero, no solo eso, debe ser un ciudadano indocumentado, porque parece que genera un tipo de dolor diferente del que causa un asesino con todos sus papeles en regla.
“Durante años, nuestros políticos y nuestros líderes han tratado a las Familias Angel [como se refiere a aquellas que han perdido a seres queridos a manos de inmigrantes sin papeles] con silencio e indiferencia. Bajo mi vigilancia, sus voces no caerán en saco roto, los estadounidenses asesinados por extranjeros ilegales nunca más serán olvidados y nos vamos a asegurar de que no han muerto en vano”, afirma el mandatario. La proclamación, de unas 700 palabras, hace un repaso a algunas de las medida migratoria de Trump, especialmente las relacionadas con los extranjeros llegados de América Latina.
Trump llegó a la Casa Blanca a lomos de un mensaje incendiario con la inmigración, acusando a México de enviar a “violadores” a Estados Unidos y usando el “vamos a construir el muro” como uno de sus lemas estrella de la campaña. Ahora, el republicano recupera su discurso más. En el último debate presidencial, el pasado 22 de octubre, se refirió a los sin papeles como “asesinos y violadores” y lamentó que «solo los que tienen el cociente intelectual más bajo se presentan al juzgado”, en referencia a las personas en situación irregular que, una vez han entrado en territorio estadounidense, acuden a las vistas establecidas por el tribunal para responder a su demanda de permiso, asilo o residencia.
Aunque siempre recalca que busca poner coto a la llegada irregular de extranjeros, su Administración ha endurecido en realidad buena parte de las vías de inmigración legal, restringiendo los criterios para los trabajadores especializados con visado H1-B y los programas de acogida de refugiados.