El último yihadista detenido por la policía adoctrinaba a jóvenes musulmanes tutelados
PATRICIA ORTEGA DOLZ. EL PAÍS.- Mohamed C., de 44 años, llegó a España desde Marruecos hace aproximadamente una década, según los investigadores de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, que le detuvieron el pasado miércoles “por captación, adoctrinamiento y colaboración con organización terrorista”. Vivió primero en Murcia, donde estuvo trabajando en el campo, y llegó al País Vasco “tras un periplo laboral por la zona de Levante”, aseguran las mismas fuentes. Se casó y tuvo dos hijos, pero “nunca quiso obtener la nacionalidad española ni que la tuvieran sus hijos, nacidos aquí”, detallan los agentes, para quienes hasta hace dos años era un hombre musulmán con antecedentes por violencia de género. Sin embargo, los flecos de las operaciones contra el terrorismo islamista Haram y Junud, desarrolladas por la policía también en Gipuzcoa, tenían a Mohamed como nexo común.
El seguimiento de algunos de esos jóvenes tutelados, llegados como “menores no acompañados” (menas) hasta centros y pisos de acogida del País Vasco, y que mostraban signos de radicalización, condujo a los agentes hasta un garaje de la localidad de Pasajes (Gipuzcoa) donde Mohamed reunía a “un máximo de cinco o seis chavales” y les imbuía el ideario yihadista.
“Llegó a tener unos 10.000 seguidores en los distintos perfiles que trabajaba en las redes sociales”, aseguran los investigadores, que definen al detenido como “una persona muy popular en su entorno y en las mezquitas irregulares de la zona”. El juez decretó su ingreso en prisión el pasado viernes, aunque dejó en libertad a otros dos detenidos, uno de ellos su colaborador más estrecho, un joven también en régimen de acogida que ha quedado en libertad con medidas cautelares.
Entre la numerosa propaganda publicada en las redes por el detenido había “diverso material grafico de menores combatientes y estética militar, dirigida a los integrantes más jóvenes, a quienes presentaban como modelos de conducta a seguir”, aseguran fuentes policiales. Además, “llevaban a cabo una preparación, física y mental, con la intención de realizar la yihad, practicaban de forma habitual deportes de contacto y poseían manuales de uso y manejo de armas blancas y de fuego”, señalan las mismas fuentes.
Vínculos con terroristas franceses
Mohamed era un hombre sin trabajo conocido, “vivía de las donaciones que obtenía de sus fieles fundamentalmente para la causa palestina”, señalan los investigadores. Los investigadores han constatado que llegó a “recaudar más de 100.000 euros”. Viajaba con asiduidad a Francia. La Policía cree que lo hacía para recaudar más fondos, pero no ocultan su relación con uno de los hombres afincados en España y relacionados con los detenidos en Francia en 2016, “cuando presuntamente trataban de comprar armas para llevar a cabo un atentado el 1 de diciembre» de ese mismo año en Francia.
La investigación, desarrollada por agentes de la Comisaría General de Información y de la Brigada Provincial de Información de San Sebastián, ha contado con la colaboración de la Agencia EUROPOL y se ha desarrollado bajo la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional y del Juzgado Central de Instrucción número 2.