Las protestas de la familia y un vídeo en internet del ataque han dado resonancia al caso entre políticos y celebridades
FRANCESC PEIRÓN. LA VANGUARDIA.– Gregory McMichael, ex policía de 64 años, y su hijo Trevor, de 34, ambos blancos, han sido detenidos por la policía de Georgia. Les acusan de la muerte de Ahmaud Arbery, un negro de 25 años al que tirotearon cuando el joven hacía jogging por su barrio de la localidad de Brunswick. Al difunto no le hallaron arma alguna. Padre e hijo fueron detenidos este jueves.
El caso se produjo el 23 de febrero y pasó bastante desapercibido más allá del ámbito local. Sin embargo, el escándalo empezó a tener resonancia entre políticos y celebridades por las denuncias de la familia del fallecido. El asunto se ha incendiado esta semana al difundirse en internet un vídeo del ataque.
La cólera prendió aún más en los ánimos al saberse que los dos presuntos autores seguían de rositas, sin ningún tipo de imputación, sin que hubiera consecuencias legales para los dos pistoleros. Las protestas se generalizaron a partir del martes.
Biden critica que es “un ejemplo de la creciente pandemia de odio en Estados Unidos”
El gobernador Brian Kemp, republicano, calificó el tiroteo de “absolutamente horrible y Georgia pide respuestas”, Joe Biden, presunto candidato demócrata a las presidenciales de noviembre, habló apasionadamente este jueves en una rueda de prensa virtual. Calificó la acción de “matanza a sangre fría”, que había sido “como un linchamiento”. Según Biden, esto es “un ejemplo de la creciente pandemia de odio en Estados Unidos”.
En la Casa Blanca, el presidente Donald Trump señaló horas después que esperaba tener “un informe completo. Se refirió al asunto como “una cosa muy triste”, aunque aseguró que no había visionado la grabación.
Como recogen esas imágenes, que causan estupor, Arbery cruza en su carrera junto a una furgoneta, con dos hombres blancos ahí mismo. Entonces, superado el vehículo, se observa como forceja con uno de ellos, que lleva un rifle. Se escuchan los disparos y como el afroamericano cae abatido al suelo.
Según un informe policial, los McMichael cogieron un par de armas y salieron detrás de Arbery con su camioneta. Gregory McMichael, detective jubilado, declaró luego a los investigadores que ese joven negro le recordó por el aspecto al sospechoso de una serie de robos en esa zona. Antes de conflicto, sostuvo que le dijo: “Párate, queremos hablar contigo”.
La prensa local informó que la policía sólo había recibido una denuncia por robo entre el 1 de enero y el 23 de febrero.
El ex policía comentó a los medios que todo se debía “a un vídeo y a una noticia de un diario”
Previa a su imputación y detención, el ex policía comentó a los medios que “hay muchos más hechos”, que todo se debía “a un vídeo y a una noticia de un diario”, sin que se haya explicado “qué es lo que condujo a esa situación”.
El suceso ha pasado por manos de varios fiscales. Empezó con Jackie Johnson, del circuito judicial de Brunswick. Ella se recusó porque Gregory McMichael había sido investigador en su oficinal. Entonces recayó en George Barnhill, de otro distrito, quién también se recusó, una vez que la madre de Arbery se quejara de que el hijo de Barnhill acostumbraba a trabajar con McMichael en la oficina del fiscal de distrito.
Tom Durden, el nuevo acusador público en asumir el caso, emitió un comunicado en el que informó que el asunto debería presentarse ante un gran jurado para que considerara los posibles cargos criminales. Lee Merrit, abogado de la familia Arbery, replicó que todos los jurados están cancelados en el estado hasta el 12 de junio por el coronavirus. El letrado urgió que los sospechosos fueran detenidos de inmediato a la espera de su imputación. Las manifestaciones ya estaban en marcha en la calle.
Violencia contra los negros
La muerte de este joven ha recordado otra vez la persistente violencia de los blancos contra los negros. Esta cuestión se ha hecho mucho más visible en los últimos años debido a la proliferación de los teléfonos móviles con cámaras. Estas imágenes han sido una iluminación, al pone en evidencia lo que antes se cerraba con una simple versión oficial en la que el afroamericano siempre había hecho algo y el blanco se había defendido.
Este caso de Georgia ha traído el eco de las muertes de Trevor Martin en Florida, de Michel Brown en Ferguson (Misuri) o la de Eric Garner en Nueva York, casos que inspiraron y dieron fuerza al movimiento Black Lives Matter. Sus protestas pusieron el foco en la brutalidad policial, la discriminación racial y la quiebra sistemática de la justicia.
