EUROPA PRESS. ABC.- Plena Inclusión España denunció este miércoles ante el Defensor del Pueblo los ataques verbales contra personas con discapacidad intelectual que practican paseos terapéuticos y pidió a la institución que recomiende la actuación de la policía en dichos casos.
«Este tipo de salidas están incluidas entre las excepciones legales reguladas por el decreto ley del estado de alarma del Gobierno» y, sin embargo, todos los días la confederación recibe «quejas por insultos, gritos y hasta lanzamiento de huevos y otros objetos», lamentó.
En su misiva al Defensor del Pueblo, Plena Inclusión subrayó el daño que estas reacciones incívicas producen en las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo y en los familiares que les acompañan.
«En ocasiones es malestar, en otras puede ser que la persona que lo oiga no comprenda por qué le agreden y sus niveles de estrés se incrementen», afirmó. «A veces, los gritos pueden suponer una sobrecarga sensorial que desencadene respuestas de miedo, dolor o conductas distrruptivas», agregó Plena Inclusión.
Por otro lado, la confederación rechazó la opción de que las personas con discapacidad salgan a la calle con distintivos que les identifiquen. «Si lo miramos desde una perspectiva de derechos, lo que se está planteando es que, aunque la conducta reprochable es de quien increpa, para estas personas no haya ningún castigo y, en cambio, los agredidos tengan que renunciar a su derecho a la intimidad», explicó Inés de Araoz, asesora jurídica de la confederación.
Aludió a la Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, en la que se defiende el respeto a la privacidad y su derecho a ser protegidas de toda injerencia arbitraria en su vida privada.
Por todo ello, Plena Inclusión reclamó al Defensor del Pueblo una recomendación a las autoridades competentes para que los servicios policiales intervengan y garanticen «paseos sin incidentes, sancionando los hechos si es preciso». Durante el estado de alarma, las fuerzas de seguridad deben garantizar «el acceso a esa utilización justificada y excepcional de la vía pública», destacó.