“No es normal que los acojamos, les demos de comer, ropa, cama y servicios básicos y encima se comporten como animales, no nos dejen dormir, generen altercados, pongan en riesgo nuestra salud y encima se escapen», lamentan los vecinos
EL PUEBLO DE CEUTA.- Los vecinos de Varela Valiños, Solís y San Daniel, barriadas más próximas al Pabellón de La Libertad, donde actualmente se encuentran acogidos más de un centenar de inmigrantes ante el Estado de Alarma aseguran que están “desesperados” ante una situación que se está agravando cada vez más sin que se ponga una solución con firmeza por parte de la Delegación del Gobierno de Ceuta que además, ha retirado la seguridad privada durante la jornada de este martes, pasando la competencia a la Policía Local, que desde este 1 de abril vigila toda la zona.
La presidenta de Varela Valiños, Nieves Contreras, reconoce que la situación es “insostenible” y reconoce que todos los vecinos están “indignados” ante lo que están teniendo que vivir como consecuencia del comportamiento de una parte mayoritaria de las personas alojadas en La Libertad. “Cada dos por tres hay un altercado en el polideportivo y encima no dejan descansar a los vecinos, pues durante la madrugada están armando jaleo, pegando voces, discutiendo y haciendo ruidos con las propias chapas del pabellón, lo que impide que se pueda conciliar el sueño”, asegura Contreras, que además subraya que “las personas que más lo están sufriendo son los vecinos que viven en el bloque que se encuentra justo al lado del pabellón, pero es un malestar generalizado en la barriada, por eso pedimos a Delegación del Gobierno que actúe, pues precisamente los vecinos somos los que merecemos estar tranquilos ante esta situación, ya que guardar el confinamiento ya es de por sí complicado, pero si encima se añade esta situación que hace que no podamos estar tranquilos ni en nuestras casas, todo se convierte en insoportable”, indica.
La presidenta en que no para de recibir quejas de los vecinos y recuerda que ellos no tienen que pagar los platos rotos de esta situación que se está viviendo en la ciudad y donde la inmigración está escribiendo un nuevo capítulo, donde a pesar de ser atendidos con la mayor de las garantías, se niegan a estar confinados y buscan la calle a toda costa, aunque tengan que escaparse por las ventanas, como ocurrió en la madrugada de este miércoles.
Ante esta situación, algunos vecinos han decidido colgar pancartas en sus balcones como señal de protesta. “No podemos ni dormir tranquilos. No somos responsables del número de inmigrantes que hay en Ceuta, ni tampoco tenemos que cargar con esa situación”, añade una vecina, que además reseña que “no es normal que los acojamos, les demos de comer, ropa, cama y servicios básicos y encima se comporten como animales, molesten, generen altercados y se escapen. Es urgente que se adopte una decisión de manera inmediata y que Delegación del Gobierno rompa su silencio y actúe en beneficio de los ciudadanos de Ceuta, que al fin y a cabo son a los que representan”, destaca.
Por otra parte, desde Solís y San daniel las quejas también son numerosas ante esta situación. «En estas barraiadas que son antiguas viven principalmente personas mayores y esto es una auténtica locura porque no nos dejan descansar. Los ruídos son insoportables y las molestías que se generan son frutos de que hay cosas que no se están haciendo bien y es lo que debe plantearse Delegación del Gobierno», expresan los vecinos, que además indican que «cuando a las 20.00 horas los ceutíes salen a sus balcones a aplaudir la labor de nuestros sanitarios, nosotros salimos para mostrar nuestro malestar por cómo se está gestionando la inmigración ante este Estado de Alarma, pues lógicamente nosotros estamos de acuerdo a que los inmigrantes estén confinados en un lugar, pero lo que no podemos permitir es que eso sea a costa de nuestra salud y de que no nos dejen descansar», expresan.
