Los sindicatos Sipla y Jupol preparan una denuncia conjunta por injurias y calumnias graves: «Esto no puede quedar impune»
I. PELÁEZ. LA NUEVA ESPAÑA.- Los sindicatos policiales han comenzado a preparar ya una denuncia conjunta por injurias y calumnias graves con publicidad después de que una gijonesa escribiese en redes sociales mensajes «muérete, así no pones más multas; muerto el perro se acabó la rabia» a raíz de la noticia en la que se informaba del positivo en coronavirus de un agente de la Policía Local de Gijón. «Esto es muy grave y no puede quedar impune, porque sino ya cualquier puede decir lo que sea y no se puede permitir», explica Ignacio Manso Platero, abogado del Sindicato Independiente Policía Local de Asturias (Sipla).
La situación actual de estado de alarma impide por el momento presentar la denuncia correspondiente contra esta mujer, pues la normativa vigente solo permite acciones judiciales urgentes. No obstante, ya se han recogido todos los comentarios vertidos por esta mujer a través de sus redes sociales de Facebook e Instagram para denunciarla «cuando sea posible».
A esa querella se sumarán también los representantes del sindicato Jupol, de la Policía Nacional. «Estas acciones incívicas son inconcebibles y no pueden quedar impunes de ninguna manera», explica Abel Rodríguez Solís, de Jupol. Este sindicato policial está representado por la abogada Sylvia Garrido Galindo.
Los comentarios de esta mujer guardan relación con las intervenciones de Policía Nacional y Local desde que se decretó el estado de alarma. En relación a una noticia de un detenido por toser a los policías que le pararon por la calle, esta mujer compartió en sus redes que «mejor le hubiese echado un esputo en toda la cara, por basura de policías». Hay más. «El odio que os tengo es muy grande, y eso que a mí no me hicisteis (sic) nada, pero sinceramente dais asco», compartió. «Segundo policía infectado, a ver si hay suerte y se infecta toda la cuadrilla», apuntó también.
El Tribunal Supremo, explican desde Jupol, ya dejó claro en sus sentencias que los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado no son sujetos pasivos de un delito de odio, como parece que encajan esas manifestaciones. Es por ello que la denuncia, «en cuanto sea posible», se presentará por un delito de calumnias e injurias graves con publicidad. «Esto no puede quedar impune», coinciden los representantes de ambos sindicatos.
