Una joven afirrma que le pidieron quitárselo como hacían otras mujeres y se negó
AGENCIAS. EL PERIÓDICO.- Una estudiante de Enfermería de la Universitat de Lleida (UdL) en el campus de Igualada ha presentado una denuncia en el Centro Dolors Piera de Igualdad y promoción de las mujeres argumentando que fue expulsada del centro en el que realizaba prácticas por llevar hijab.
Según el relato de la entidad Es Racismo, la alumna, de cuarto curso, recibió el ultimátum de un día para otro, de palabra y sin apoyo escrito. La víctima les explicó que otras mujeres musulmanas que trabajan en el centro se lo quitan, pero que ella no quería hacer lo mismo. Desde el centro, explican, le indicaron que, aunque estaban contentos con su trabajo, si no se lo quitaba, no podría continuar.
La entidad afirma que la joven ya había estado en otros centros y que nunca había tenido ningún problema, informa ACN.
El Consejo del Estudiantado de la Universidad de Lleida ha asegurado este lunes en un comunicado que algunos de sus miembros han acompañado a la estudiante al Centro Dolors Piera para que «tramite un expediente y extraiga las conclusiones pertinentes sobre la situación, la responsable y centro donde ocurrieron los hechos y las soluciones ofrecidas por la Universidad».
En su cuenta de Twitter, el campus de Igualada de la UdL lamentó el viernes la prohibición a su alumna de llevar hijab mientras hacía prácticas en un centro externo, situación que según la universidad se resolvió «asignando un centro alternativo».
Actividad profesional
El Consejo del Estudiantado sostiene que «las normas de vestimenta deben estar relacionadas con la actividad profesional desarrollada y no ser un mero capricho del empleador ante el cual prevalece la libertad de religión», informa Europa Press.
En este contexto, el consejo pide a la UdL que emprenda las acciones necesarias para evitar que se vuelva a repetir una situación similar apoyando la iniciativa que propone la estudiante que incluye la incorporación de una cláusula en los convenios de prácticas vigentes y futuros exigiendo a las instituciones colaboradoras que no efectúen ningún tipo de discriminación por razón de «nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social incluida la libertad de profesar la religión o la creencia tanto en público como en privado».