El PP y Vox imposibilitan que se cumpla el requisito de unanimidad al posicionarse en contra
JUAN JOSÉ MATEO. EL PAÍS.- La bronca entre partidos ha impedido este jueves que el pleno de la Asamblea de Madrid condene con una declaración institucional el ataque con una granada que sufrió el miércoles el centro de primera acogida de menores de Hortaleza. El requisito reglamentario de que haya un apoyo unánime de todos los grupos no se ha cumplido al oponerse PP y Vox al texto, que pone el acento en los discursos de odio de la extrema derecha como origen del incidente. Para no votar a favor, los dos partidos se han agarrado al argumento de que la policía mantiene abiertas todas las líneas de investigación, y que sus especialistas analizan aún si el origen del ataque está en la extrema derecha, que se ha manifestado repetidamente ante la instalación; o en las bandas latinas, que intentaron asaltar el centro en octubre.
«Creemos que hay que ser prudentes», ha dicho Alfonso Serrano, el portavoz popular. «Todos compartimos la rotunda condena de un hecho tan grave pero no podemos caer en juicios de valor cuando la Policía pide prudencia y están todas las líneas de investigación abiertas y los trabajadores piden que no haya un uso partidista de esto», ha argumentado. «Esa declaración institucional va más allá de lo que debe ser un compromiso de apoyo a los trabajadores y condena del ataque», ha rematado sobre el texto consensuado entre PSOE, Cs, Más Madrid y Unidas Podemos Madrid en Pie. Un acuerdo que ha dividido a los dos socios del primer Gobierno de coalición de la historia de la región: mientras que el PP no lo ha firmado, Cs sí lo ha hecho.
«Me parece vergonzoso que algunos lideres y algún ministro hayan lanzado a las hordas del odio contra un partido y su portavoz, sin tener la información y los datos», ha coincidido Rocío Monasterio, de Vox, que minutos después ha protagonizado un duro choque al respecto con la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, en el pleno.
En octubre, una treintena de personas intentó asaltar el centro de Hortaleza armada con barras de hierro y cadenas. En noviembre, el grupo neonazi Hogar Social convocó manifestaciones ante la instalación para protestar contra la inseguridad en el barrio. Y ese mismo mes, Santiago Abascal, líder de Vox, mencionó el supuesto miedo de los vecinos del distrito de Hortaleza durante el debate televisivo de los candidatos a la presidencia del Gobierno. No ha sido la única vez que los políticos del partido de extrema derecha han colocado a los menores migrantes de Madrid en el corazón de su estrategia política. Vox ha hecho campaña ante el centro, hasta el que se desplazaron en los últimos meses tanto Javier Ortega Smith como Rocío Monasterio.
Pacto imposible entre partidos
Esa táctica de la extrema derecha, unida al rechazo de Más Madrid a sentarse con ella en la misma mesa, ha hecho que salte por los aires el pacto que buscaba el Gobierno con todos los partidos para decidir medidas en favor de los menores. El pleno de este jueves ha ejemplificado las razones del fracaso, y ha dejado abierta la puerta adoptarlo sin Vox.
«Nos hubiera gustado que hubiera una declaración, denunciar el hecho y mostrar solidaridad con los niños y niñas y los docentes y trabajadores del centro», ha lamentado el líder del PSOE, Ángel Gabilondo. «Tratamos de buscar un pacto, que no se puede dejar de hacer por un grupo», ha dicho, en referencia a Vox. «Que se aclare [lo que ha ocurrido]», ha pedido. «Cualquier otra cosa nos parece poco responsable».
“Es evidente que hay organizaciones que han formado este caldo de cultivo”, ha opinado Pablo Gómez Perpinyà, portavoz de Más Madrid, sobre la formación de extrema derecha. “Condeno el atentado y los discursos xenófobos. Hay que lamentar que la Asamblea no lo haga por el voto en contra del PP y VOX”, ha coincidido Isabel Serra, de Unidas Podemos.
“Sería deseable la unanimidad”, ha rematado Alberto Reyero, el consejero de Políticas Sociales, que busca un difícil acuerdo entre opuestos.