La marcha empezó a gestarse tras el ataque contra una mezquita en Bayona. Para la líder del Reagrupación Nacional, Marine Le Pen, está organizada por «islamistas»
AFP. EL MUNDO.- «Es urgente vivir juntos«. Es uno de los lemas coreados este domingo en la marcha contra la islamofobia, una polémica manifestación que ha provocado divisiones en la izquierda y críticas entre la extrema derecha.
«Sí a la crítica de la religión, no al odio al creyente», «Parad la islamofobia», «Solidaridad con las mujeres que llevan velo», se podía leer en las pancartas de manifestantes entre banderas de Francia.
Unas 13.500 personas participaron en la marcha en la capital, según un primer recuento realizado por los medios de comunicación y convocado por varias personalidades y organizaciones como el Colectivo contra la Islamofobia en Francia.
La marcha empezó a sugerirse tras el ataque contra una mezquita en Bayona y en el contexto de un vivo debate sobre el velo y la laicidad del país.
«Estoy cansada de que me digan que me vuelva a mi país. Soy francesa», dice Amina, una informática de 26 años.
«Hemos venido con un mensaje de tolerancia, para vivir todos en unidad, contra las discriminaciones. Es urgente que dejemos de enfrentarnos entre nosotros», añade Amina.
«Queremos una sociedad mixta, no ser apartados», apunta Asmae Eumosid, una mujer que lleva velo y tiene 29 años.
«Se escucha de todo sobre el islam y sobre las mujeres que llevan velo. Se está tratando de estigmatizar a los musulmanes«, asegura esta ingeniera en el sector del automóvil.
Pero desde la convocatoria de la manifestación, la clase política no ha dejado de enfrentarse, incluso a propósito del concepto de «islamofobia».
En la marcha de París (ya que la manifestación también se ha desarrollado en otras ciudades de Francia) varios diputados del partido de extrema izquierda, Francia Insumisa, estuvieron presentes junto al líder del mismo, Jean-Luc Mélenchon, que pidió al inicio de la misma «no confundir a ciertas personas con el valor de la causa».
Por otro lado, Marine Le Pen, líder de Reagrupación Nacional (antes, Frente Nacional) dijo ayer que la manifestación estaba «con los islamistas». Varios miembros del Gobierno también fueron muy críticos con la manifestación. El Secretario de Estado encargado de Juventud la calificó de «insoportable».