EL DIARIO DE CANTABRIA.- Un centenar de personas ha participado esta tarde en la manifestación convocada por una docena de colectivos contra ‘el fascismo y el racismo’, en «respuesta» a la manifestación «fascista», convocada también para este sábado por la Asociación Cultural Alfonso I. La concentración se ha desarrollado bajo la lluvia y con intensa presencia policial, pero las agresiones «fascistas» no han tardado en llegar, como denuncia la Asamblea Feminista Abierta de Cantabria en su cuenta de Twitter. En la publicación, se puede ver como, en la centrica Plaza de Cañadío, un grupo de ultraderecha arranca la pancarta de #FeminismoAntifascista que portaban unas chicas, que al intentar recuperarla han sido agredidas. La propia Asociación detalla que tras aparecer la policía los agresores huyen del lugar de los hechos.
La manifestación, que ha recorrido las calles de la capital, saliendo de la Plaza de Cañadío y concluyendo en el cruce de Juan de Herrera con Santa Clara, se ha desarrollado bajo el lema ‘Paremos al fascismo y al racismo’, y con numerosas banderas republicanas, los participantes en manifestación han coreado «fuera fascistas de nuestros barrios», «no son patriotas, son fascistas», o «por la justicia social, la tolerancia y la libertad». Las organizaciones convocantes son CNT, Izquierda Unida, Cantabria No se Vende, PCPE, Banco Obrero de Alimentos (BOA), JCPE, Interpueblos, PCE, CGT, COLEST, Juventud Comunista, Asamblea Feminista Abierta de Cantabria, Asamblea contra el fascismo y la discriminación y STEC.
Los convocantes sostienen que el fascismo «se engalana con palabras como honor o valor, pero siempre intenta camuflarse, manipular y engañar para ocultar su violenta y excluyente naturaleza, presentándose como un movimiento respetable e incluso como una autodefensa». Una de «sus máscaras preferidas» es la del «patriotismo», mientras que a quienes se enfrentan a ellos «nos descalifican como la ‘anti-España'», cuando lo que «quieren» es «una España como imposición», «uniforme» y «reaccionaria», así como «xenófoba y racista», afirman.
