Las asociaciones exigen a Interior retirar del registro civil las direcciones privadas de los reporteros que aparecen en «listas de la muerte» de grupos neonazis
CARLES PLANAS BOU. EL PERIÓDICO.- «Somos un objetivo del odio de la extrema derecha«. Así de contundentes han sido las principales asociaciones de periodistas de Alemania, que este miércoles publicaron una carta abierta al ministro del Interior, Horst Seehofer, exigiéndole una mayor protección de los reporteros ante las crecientes amenazas de grupos ultranacionalistas.
En un comunicado conjunto organizaciones como la Asociación Alemana de Periodistas o el Sindicato Alemán de Periodistas reclaman al ministro dos medidas clave. Por un lado, informar a los reporteros que figuran en esas listas para que sean conscientes de que están bajo amenaza y proporcionarles información y recomendaciones para su seguridad.
Grupos neonazis investigados como ‘Nordkreuz’ pretendían asesinar periodistas incómodos, activistas y políticos favorables a la acogida de refugiados. En 2017 una redada descubrió una lista con 25.000 nombres, aunque aseguraron que la amenaza «está descartada». El Ministerio del Interior está obligado a informar a las personas que aparecen en estas listas, pero solo si los afectados lo solicitan, algo que dificulta el procedimiento.
Eliminar direcciones particulares
Por el otro, solicitan eliminar las direcciones privadas de estos periodistas del registro civil. «En algunos estados federales, los profesionales de los medios de comunicación tienen que demostrar en primer lugar un grave peligro para su vida y su integridad física para que se les imponga una prohibición de información», reza el comunicado. «Pero entonces ya podría ser demasiado tarde para protegerse a sí mismos».
Tras darse a conocer la existencia de estas «listas de la muerte» el pasado julio, Seehofer remarcó que «no debemos retroceder ante tan pérfidos intentos de intimidación«. Sin embargo, en su carta los periodistas alemanes critican que a veces es la propia policía quien les hace retroceder y les aconsejan «retirarse de lo público» para evitar amenazas. «Así hacen que la estrategia de intimidación de la ultraderecha sea un éxito», explican.
Ante el auge de la extrema derecha parlamentaria y de los recientes casos destapados de terrorismo neonazi los periodistas alemanes ven cómo cada vez más pueden estar en el foco de sus acciones. La carta reivindica ahora una máxima de cualquier democracia: «Es indispensable que se garantice la seguridad de los profesionales de los medios de comunicación para que puedan ejercer su profesión sin trabas».
