El Supremo avala el arresto de tres guardias civiles que pusieron el ‘Cara al sol’ por los altavoces del cuartel
JOSÉ ANTONIO HERNÁNDEZ. EL PAÍS.- Tres guardias civiles, con la megafonía a todo volumen y cantando el Cara al soldentro del cuartel. Ya hay condena definitiva. El Tribunal Supremo ha ratificado la pena de siete días de arresto para un sargento de la Guardia Civil que, junto a dos subordinados, los tres con el brazo extendido, pusieron a todo volumen los altavoces del cuartel de Vilafranca de Bonany, localidad balear de unos 3.000 habitantes, mientras varios vecinos les grababan desde la calle a través de una ventana abierta. 52 segundos duró la escena.
“Bueno, para que veáis cómo probamos el sonido para el día del Pilar”, se oye decir al sargento y comandante de puesto, uno de los arrestados. Los guardias ignoraban que les estaban grabando. El sargento hizo ese comentario mientras transmitía al vecindario el himno de la Falange Española de la Jons, compuesto en 1935 por el fundador de ese movimiento, José Antonio Primo de Rivera. Tanto el himno como el comentario del sargento se oyeron con nitidez, según declara probado la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo, que censura lo ocurrido.
En el vídeo, se ve al sargento, Alfredo P. C. y a los otros dos guardias, también condenados, pero estos a cinco días de arresto, en “actitud jocosa, vestidos de paisano y extendido el brazo”, señala el tribunal. El vídeo circuló en los siguientes días por las redes sociales y fue publicado en prensa. Era el 10 de octubre de 2016 y los guardias estaban preparando la megafonía para los actos de la festividad del Pilar, patrona de instituto armado, que se celebraron dos días después.
Al mantener la condena, el Supremo avala una sentencia del Tribunal Militar Central que condenó al sargento y a los otros dos guardias por una “una falta grave” relacionada con la “observancia de conductas gravemente contrarias a la dignidad de la Guardia Civil”. Los dos subordinados admitieron la pena y los hechos, pero el sargento decidió recurrir al Supremo. No estaba de acuerdo. Negó que la frase que se oye en la grabación (“Bueno, para que veáis cómo probamos…) la hubiese pronunciado él, contra el criterio de los peritos judiciales que la analizaron y el testimonio del teniente general jefe del Mando de Operaciones Territoriales de Baleares, que identificó la voz del que era su comandante de puesto en ese cuartel, hoy destinado fuera de Baleares.
El Supremo señala que hay determinados comportamientos, y este está subsumido en ellos, de los que la Guardia Civil debe «abstenerse». La sentencia del Tribunal Militar ahora avalada destaca que el himno falangista sonó “cerca de un minuto, con música paramilitar de connotaciones evidentes con el régimen anterior (…), causando la natural alarma y sorpresa entre la vecindad”.