Los detenidos llamaron “vieja” y “piojosa” a la mujer, que además resultó herida y con lesiones por la agresión de la que fue objeto cuando intentó evitar el hostigamiento a un varón
JORDI LANDERO. HUELVA INFORMACIÓN.- Una vecina de Cartaya, Paqui Gómez Javier, acabó este martes siendo atendida en un centro hospitalario por las heridas y lesiones que sufrió como consecuencia de la agresión de que fue objeto por parte de cinco jóvenes cuando intentó evitar que éstos siguiesen acosando a un hombre con discapacidad psíquica.
Así lo ha relatado a Huelva Información la propia víctima de la agresión, que en la denuncia que interpuso ese mismo día en el cuartel de la Guardia Civil de Cartaya, a la que ha tenido acceso esta redacción, afirma haber sido objeto de un delito delesiones por el que sufre una herida contusa facial como consecuencia del cabezazo que le propinó uno de los agresores, así como una contractura cervical por la que deberá llevar un collarín, en principio durante los próximos tres días.
Según la denuncia los hechos tuvieron lugar el martes entre las doce y las doce y cuarto del mediodía en la calle Perú de Cartaya, cuando “un chaval de unos 17 a 18 años le ha insultado, escupido y agredido” después de recriminarle tanto a éste, como a otros cuatro jóvenes “la actitud que estaban teniendo con una persona con discapacidad”.
En su relato, Paqui asegura que “estos cinco jóvenes tenían a esta persona acorralada en un portal, a la vez que la insultaban y le tiraban latas de refresco, con agresividad”.
La agredida afirma en la denuncia que mientras recriminaba la actitud de los cinco jóvenes, llegó a llamarlos “sinvergüenzas”, al tiempo que les avisó de que llamaría a la Guardia Civil si no paraban y “dejaban en paz” al hombre discapacitado. Igualmente les advirtió de que “les haría una fotografía”.
Dada la situación uno de los jóvenes le respondió llamándola “piojosa” y “vieja de mierda”, a la vez que le escupió y, sin esperárselo le propinó un “cabezazo en toda la cara”, por el que se quedó “un poco aturdida, llegando a tener un poco de miedo cuando vio que de la cara le derramaba sangre”, a lo que añade en la denuncia que incluso “llegó a perder un poco el rumbo y a marearse en ese mismo instante”.
Paqui Gómez Javier también afirma en la denuncia que requirió asistencia médica, siendo atendida en las urgencias de un hospital de Lepe, donde después de ser sometida a un TAC, y según refleja el parte médico, al que también ha tenido acceso Huelva Información, presenta una “herida contusa en el pómulo derecho, con hematoma”, además de una “contractura cervical”.
“Dejar que me vaya tranquilo a casa, por favor, es lo único que repetía a gritos la persona con discapacidad psíquica a la que los jóvenes agredían”, ha señalado Paqui Gómez en declaraciones a Huelva Información, a la vez que lamenta el hecho de que “nadie, de las numerosas personas que pasaron por allí, intervino para intentar evitar lo que estaba pasando”.
Igualmente asegura que “volvería a hacerlo”, en caso de encontrarse con una situación similar, ya que “me sale de dentro intentar ayudar a una persona discapacitada que necesita ayuda”. Y es que, según añade, “es una pena que un señor en esas condiciones tenga que estar esperando en un portal, como fue el caso, a que alguien le ayude a salir porque hay cinco niñatos increpándolo y tirándole todo lo que encontraban por el suelo: latas de refresco, saliva y hasta alguna piedra”, concluye.