ESTEBAN IBARRA, Presidente de Movimiento contra la Intolerancia
Durante los últimos años se está produciendo en Europa un incremento de la violencia y los delitos dirigidos hacia colectivos específicos como los inmigrantes, las minorías étnicas, colectivos religiosos, culturales e ideológicos, personas por su orientación sexual, indigentes, etc. Las condiciones sociales, políticas e institucionales, a menudo permisivas o con instrumentos legales poco eficaces e incluso inexistentes, están generando fisuras y espacios en las democracias europeas que aprovechan para su fortalecimiento las organizaciones neonazis, racistas y xenófobas que, con un abierto carácter transnacional, utilizan todos los resquicios del Estado de Derecho, espacios como Internet y la mejora de las comunicaciones para incrementar su actividad criminal beneficiándose de la falta de coordinación, conocimiento mutuo y agilidad de los aparatos jurídicos europeos. El fanatismo, la intolerancia y el odio hacia el diferente y hacia la sociedad democrática crece en todos los países europeos.
Esto es un hecho, no es una intuición, las noticias recogidas en el Informe Raxen, en la sección de “Teletipos Internacionales” lo acreditan, desde los sucesos de asesinatos, violencias, profanaciones de tumbas en Alemania que llevaron al Parlamento Federal a crear una base de datos centralizada que acoge a mas de 25.000 extremistas de ultraderecha, 9.500 especialmente violentos, hasta la confirmación neonazi en Grecia del partido “Amanecer Dorado” que conseguía consolidar un 7% de los votos con 21 diputados racistas, las persecuciones contra los gitanos en Hungría, la homofobia criminal en Italia, pasando por el apoyo de amplios sectores de la ultraderecha europea al pensamiento xenófobo del terrorista Breivick, asesino de 77 personas en Oslo. Una intolerancia criminal que se extiende a nivel planetario, vislumbrando posiciones planetarias contrarias a la globalización de los derechos humanos y a los valores democráticos, muy
visible en EE.UU. y muchos países latinoamericanos o en Europa del Este, que coinciden con un resurgimiento de integrismos a gran escala que amenazan con dar al traste las grandes conquistas democráticas y sociales de la historia de la humanidad. Estamos ante la Mundialización del Odio, realidad que se evidencia por sus frutos, salvando las distancias y dimensiones, con los lobos solitarios y sus células, los grupos neonazis, racistas y neofascistas en occidente, o en otras latitudes, los alqaeda, talibanes e integristas religiosos.
Por nuestra parte, frente a la ofensiva de la intolerancia hemos impulsado el proyecto “Stop a los Crímenes de Odio en Europa” presentado por Movimiento contra la Intolerancia en el Programa “Justicia Penal” fue aprobado y subvencionado por la Dirección General de Justicia, Libertad y Seguridad de la Comisión Europea y ha contado como asociados con la colaboración de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), la Unión Progresista de Fiscales (UPF), The Police College of Finland y la Associação Portuguesa de Apoio à Vítima. Un proyecto que ha estudiado instrumentos jurídicos en Europa, elaborado un Protocolo de protección y atención a las víctimas de delitos de odio e identificado buenas prácticas, además de crear una Base de Datos on-line con sentencias jurídicas , http://stophatecrimes.es y el comienzo de una Red Europea contra los Crímenes de Odio, http://www.redeuropeastophatecrimes.com que permita articular y sincronizar una respuesta de ámbito europeo.
Presentados sus resultados, coincidiendo con la Semana Internacional de lucha contra el Racismo (23 Marzo) , cuyos materiales se pueden encontrar en los Cuadernos de Análisis nº44 y nº 45 y descargar en la webhttp://www.movimientocontralaintolerancia.com , se abre un nuevo ciclo de intenso trabajo porque aun resta lograr el reconocimiento de los derechos de la víctima de odio, discriminación o violencia por motivo de intolerancia, o de cualquiera de sus manifestaciones, incluida la intolerancia religiosa, sea la xenofobia, el racismo, la islamofobia, el antisemitismo, la aporofobia, la misoginia, la homofobia, rechazo de género o cualquier otra expresión heterófoba de negación de la diversidad humana. Falta impulsar el estudio integral y desarrollo de la victimología desde la perspectiva de personas y colectivos que reflejan la diversidad humana y sufren la intolerancia, impulsar el desarrollo del discurso académico, jurídico, político y social, que contemple la victimización y actuaciones integrales para la prevención y erradicación de la discriminación y los delitos de odio. Y falta sobre todo, lograr un consenso democrático profundo para erradicar el racismo y la intolerancia, defendiendo a fondo, todos a una, los valores democráticos, la dignidad de la persona y universalidad de los derechos humanos, la igualdad, libertad y tolerancia, así como la solidaridad con las víctimas de la discriminación, odio y violencia. Aún queda mucho camino que estamos obligados a recorrer. ¡Tolerancia o Barbarie!
Esteban Ibarra
Presidente de Movimiento contra la Intolerancia
“STOP HATE CRIMES”.
Declaración de la Conferencia Final
Las entidades participantes en el proyecto “Stop a los Crímenes de Odio en Europa”, en el Programa “Justicia Penal” de la Dirección General de Justicia, Libertad y Seguridad de la Comisión Europea, Movimiento contra la Intolerancia, Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), Unión Progresista de Fiscales (UPF) y la Associação Portuguesa de Apoio à Vítima,
Preocupadas por el crecimiento de manifestaciones de xenofobia, racismo e intolerancia asociada.
Alarmadas por la visible presencia del discurso de odio en Internet, por la proliferación de grupos extremistas e incidentes contra inmigrantes, gitanos, musulmanes, judíos, homosexuales y otras minorías,
Consternadas por los recientes actos criminales en Oslo, Alemania, Italia, Chequia y Francia, entre otros, que tienen por motivo el “odio al diferente”,
SOLICITAMOS
1.- A las instituciones y gobiernos europeos, la aplicación de la Decisión Marco de Derecho Penal contra el Racismo y la Xenofobia aprobada por el Consejo de la Unión Europea.
2.-El cierre de webs y otras expresiones de CiberOdio e ilegalización y puesta a disposición judicial de grupos y organizaciones racistas y neonazis, así como de aquellos que colaboren en su actividad y sostenimiento.
3.- El reconocimiento de la especificidad del “delito de odio” conforme al criterio aprobado por el Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la OSCE (Maastricht diciembre 2003) y el establecimiento en todos los países de la Unión Europea de “Estadísticas” de estos hechos que permitan realizar un seguimiento y desarrollar una política europea criminal adecuada.
4.- La reclamación a todos los Gobiernos de la Unión de la creación de Fiscalías, instrumentos jurídicos y policía especializada en delitos de odio que permita una actuación eficaz frente a esta criminalidad.
5.- El reconocimiento de las víctimas de crímenes de odio en todos los países de la Unión Europea, de su memoria, reclamación de justicia y derecho a la reparación, y el apoyo a sus asociaciones y organizaciones de solidaridad.
6.- El impulso en todos los países de la Unión Europea de Planes Integrales de prevención y erradicación del racismo, la xenofobia y otras manifestaciones asociadas de intolerancia.
Finalmente solicitamos al Parlamento Europeo que proclame el 22 de julio como Día de la Víctima del Crimen de Odio, en recuerdo y solidaridad con las víctimas de la matanza perpetrada en Oslo por el terrorista que acabó con la vida de 77 personas motivado por su odio a la sociedad intercultural.
También suscriben esta declaración: Red Europea “Stop Hate Crimes”, Forum of European Roma Young People, Acció Popular contra la Impunitat, Plataforma Ciudadana contra la Islamofobia, Red Cívica contra el Antisemitismo, Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales, presentes en la Conferencia Final de este proyecto.
Madrid, 23 de marzo de 2012