Un monitor denunció acoso, humillaciones y una agresión por su condición sexual
ALEXANDER CORTÉS. ELDIARIO.ES.- El director del gimnasio de Maioris ha sido condenado por una agresión homófoba el pasado verano a uno de sus monitores. El trabajador del centro denunció el acoso, los insultos y humillaciones que vivió por parte de su jefe durante cuatro meses por su condición sexual y que le propinó un puñetazo en una discusión al presentarle su baja.
Los hechos tuvieron lugar el pasado mes de septiembre. La justicia condena ahora al director del gimnasio por un delito leve de lesiones por el puñetazo a su trabajador y le obliga a pagar 800 euros de multa e indemnización a pagar al monitorCésar Moquete por las lesiones sufridas. El juez considera probados todos los hechos.
«Me llamaba diva, maricona y maricón de mierda delante de otros compañeros. Un día notaba que no podía respirar, me dio un ataque de ansiedad y decidí dejar el trabajo. A partir de ahí las humillaciones y el acoso fueron a más. Me di de baja y cuando fui a buscar el finiquito, discutimos y me acabó pegando un puñetazo«, relató a este diario Moquete, al que apenas medio año después la justicia da la razón.
Después de denunciar los hechos, la asociación Ben Amics, que le ha estado asesorando, le apoyó públicamente con una pequeña concentración frente al gimnasio al que también se sumaron alumnas de Moquete. Desde la entidad señalaron entonces que los casos de homofobia que más se están atendidos son, precisamente, en el ámbito laboral.