No hay ningún detenido en relación a estos sucesos, sufridos por dos víctimas. La raza, la ideología y la orientación sexual siguen siendo los principales motivos de las agresiones
EL ADELANTADO.- El Ministerio del Interior acaba de publicar el informe nacional en el que se recogen los delitos de odio registrados en todo el territorio nacional durante el año 2017. Dichos delitos de odio “comprenden todas aquellas infracciones penales y administrativas cometidas contra las personas o propiedades por cuestión de raza, etnia, religión o práctica religiosa, edad, discapacidad, orientación o identidad sexual, situación de pobreza y exclusión social o cualquier otro factor similar, como las diferencias ideológicas”.
Según el informe de Interior, en la provincia de Segovia tuvieron lugar solamente dos delitos de odio en todo el año, ambos relacionados con el racismo, que dejaron dos víctimas y ningún detenido. A pesar del escaso número, cabe recordar que en 2016 no se registró ningún suceso de ese tipo; aunque en 2015 fueron cinco, dos relacionados con personas discapacitadas, otros dos por cuestión de ideología y uno por creencias o prácticas religiosas. Estos sucesos dejaron cuatro víctimas y los efectivos de los Cuerpos de Seguridad del Estado detuvieron o imputaron a cinco personas, todas ellas relacionadas con los dos sucesos sufridos por las personas con capacidades diferentes.
La tasa de delitos de odio en Segovia es una de las más bajas de España, al quedarse en 1,3 sucesos por cada 100.000 habitantes, mientras que la media regional es de 3. En Castilla y León fue un poco más baja, de 2,6, siendo Salamanca (3,9) y Burgos (3,4) las provincias con mayor tasa de delitos de odio.
En total, en Castilla y León se registraron 62 incidentes de este tipo, la mayoría de ellos relacionados con la ideología (25) y con la xenofobia (23). Asimismo, hubo 7 agresiones por la orientación sexual de las víctimas; y otros 6 por creencias o prácticas religiosas. El último lo provocó la discriminación por razón de sexo o género.
En España, la cifra ascendió a 1.419, también la mayoría por racismo (524), ideología (446) y orientación sexual (271). Asimismo, se incrementaron los delitos de odio contra los pobres e indigentes (aporofobia), llegando a 103.
“Aunque cuantitativamente estos delitos no representen un porcentaje significativo del total de infracciones
penales cometidas en España, son un objetivo prioritario del Gobierno por representar un ataque especialmente grave contra los derechos humanos y los valores de diversidad y pluralidad que sustentan la democracia”, aseguran desde el Ministerio del Interior, que ha elaborado un nuevo plan de acción para luchar contra los delitos de odio.