Es la de Justicia, la guayanesa Taubira. La comparan con un mono.
MARÍA LAURA AVIGNOLO. CLARÍN.- Después de los silbidos al presidente de la república, el racismo virulento contra la ministra de Justicia francesa, Christiane Taubira. En medio de un clima político irrespirable en Francia, la revista de ultraderecha Minute publicó ayer en su tapa un perfil y un título tan provocador como ofensivo sobre ella: “Maligna como un mono, Taubira encuentra la banana”, reza, junto a una foto de la única ministra negra y guyanesa del gabinete de François Hollande.
Una alusión a los ataques racistas que ella sufrió algunas semanas atrás, después de que pusiera en marcha las reformas penales y judiciales que la derecha ve con profundo malestar, y defender y conseguir, con maestría legislativa, la ley del matrimonio gay. Una candidata del ultraderechista Frente Nacional la llamó “mono”. Manifestantes que se oponían a la autorización del matrimonio homosexual arrojaron bananas.
La tapa de Minute recibió la condena unánime de toda la clase política francesa y un aire de furia se extendió al gobierno socialista. El primer ministro Jean Marc Ayrault decidió convocar al procurador de la república porque “los hechos son susceptibles de constituir la infracción de la injuria pública de carácter racial”. Una acción que apoyó el líder de la oposición conservadora de la UMP, Jean François Cope.
“El racismo no es una opinión. Es un delito penado por la ley de la república”, advirtió Ayrault ante la Asamblea Legislativa. “Mi mano no temblará”, agregó.
El ministro del Interior, Manuel Valls, estudia si es su Ministerio o la Justicia quien confiscará de los kioscos la revista. La Justicia puede retirarla “por un sólido motivo, como un atentado a la dignidad humana”. En el caso del Ministerio del Interior, un artículo de una ley del general De Gaulle lo faculta, sin pasar por la vía judicial, a prohibir “la exposición a la vista del público” de “toda publicación que represente un peligro para la juventud por incitar a la prostitución, el odio, el crimen o la discriminación contra una persona determinada”. La revista dijo que había buscado “hacer un golpe publicitario”.
Una semana atrás, frente a los insultos racistas contra ella, la ministra Taubira habló de una “banalización del racismo en Francia”.
Esta extraordinaria oradora, que es aplaudida por la oposición y los socialistas en la Asamblea en sus poderosos discursos, señaló que “la única forma de evitar la exacerbación del racismo” y el éxito del xenófobo Frente Nacional, que crece como el partido más popular de Francia, “es devolver la esperanza a los partidos republicanos”.
