20 MINUTOS. SPORTYOU.- La violencia en el fútbol argentino está a la orden del día y muy de actualidad por los recientes acontecimientos en Buenos Aires que se saldaron con la suspensión del partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores y su traslado a Madrid. Precisamente en la capital española se encuentra una conexión entre ‘La 12’, nombre con el que se conoce a los ‘barrabravas’ de Boca Juniors, y los Ultras Sur, antiguo grupo radical del Real Madrid. Según relata Infobae, hace 15 años, el jefe de los barrabravas de Boca, Rafael Di Zeo, líder desde 1996, montó una especie de máster en ser radical. Con sus consejos, pretendía enseñar a grupos ultras de todo el mundo a gestionar la grada, a que fuera rentable económicamente a base de ingresos de dudosa legalidad.
Todo empezó a raíz de que Di Zeo montara un negocio turístico por el que los viajeros, y por un módico precio de unos 150 dólares por cabeza, pasaban un día de partido en ‘La 12’. Ahí el líder vio que, si había gente dispuesta a pagar para vivir la intensidad de la violenta barra, habría grupos ultras que quizá quisieran conocer de cerca la meca del fútbol radical. Y así fue. En 2005, comenzó la relación entre ‘La 12’ y los Ultras Sur. El curso para ser un buen radical costaba 5.000 euros y había que pasar unos 15 días en Argentina, conviviendo con los barrabravas. Las reuniones/clases tenían lugar en la Casa Amarilla, lugar de entrenamiento de la cantera de Boca. Al término de los días de instrucción, se les daba un CD con las canciones y se hacía un posterior seguimiento online para comprobar los avances. La relación de Di Zeo con los Ulotras Sur se mantuvo, con viajes a la capital para encontrarse con sus ex alumnos, durante los años posteriores al curso. Sin embargo, en 2013, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, decidió desmantelar el grupo ultra y formar una grada de animación.