Antiviolencia propone sanciones a un grupo de hinchas del Oviedo a quienes acusa de boicotear el sistema de acceso con huella al Tartiere
XUAN FERNÁNDEZ. LA NUEVA ESPAÑA.- La Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte propuso ayer sancionar a un grupo de aficionados del Oviedo con una multa de 4.000 euros y la prohibición de entrar a estadios de fútbol durante un año por los incidentes que se produjeron en la previa del partido entre el Oviedo y el Extremadura, disputado el pasado 19 de agosto. Entonces, un amplio grupo de seguidores azules, con ubicación en el Fondo Norte, tuvieron problemas para acceder al estadio por fallos en el sistema de reconocimiento de huella dactilar, que se aplica sólo en esa zona del estadio. Muchos tuvieron que dar la vuelta al estadio para poder coger una entrada, accedieron al recinto pasados veinte minutos y se perdieron el primer gol de la temporada del Oviedo.
Antiviolencia publicó ayer una resolución en la que acusa a un grupo de aficionados azules, sin detallar el número concreto ni las peñas a la que pertenecen, de «protagonizar diversos incidentes en las puertas 9 y 10». El escrito recoge claramente que «dichos aficionados deliberadamente provocaron el colapso del acceso (con huella dactilar), enfrentándose a los vigilantes de Seguridad y haciendo necesaria la intervención de los funcionarios para reconducir la situación». Los aficionados azules testigos del acceso aquel día siempre negaron que se hubiera producido un boicot al citado método. Los problemas del acceso al campo del Fondo Norte en ese encuentro fueron la mecha que desencadenó el conflicto entre el club y ese sector de la afición, que culpaba directamente al jefe de seguridad del Oviedo, José Ramón Álvarez-Sala, de la situación. Álvarez-Sala llegó a denunciar por amenazas e insultos a dos miembros del Fondo Norte, que reconocieron los hechos, fueron absueltos y manifestaron su arrepentimiento. En este contexto, Antiviolencia también propone para sanción a «aquellos aficionados que han protagonizado incidentes de carácter leve, como insultos y amenazas a los responsables de seguridad de los estadios, no seguir sus indicaciones, entorpecer las intervenciones de los funcionarios o consumir bebidas alcohólicas y/ o estupefacientes». Después de una tensa espera, con reuniones muy ásperas, el club y el Fondo Norte llegaron a un principio de acuerdo hace días. El club aceptó la petición del Fondo Norte de retirar como interlocutor de los hinchas a Álvarez-Sala y poner a otro empleado del club azul.
La Comisión, por otra parte, hizo ayer oficial que el Oviedo-Osasuna será de «alto riesgo», algo que ya se daba por seguro desde el martes. La presencia de Indar Gorri, ultras de Osasuna, en Oviedo, obliga a un amplio despliegue policial. Serán escoltados hasta el estadio, donde tendrán que entrar dos horas antes del inicio.