La organización Make the Road New York ha publicado una encuesta que revela que mientras la discriminación media en el colectivo LGTB en general es del 27,3%, en el caso de los transexuales este porcentaje aumenta hasta el 40%.
Si ya el un 27% del colectivo LGTB neoyorkino es víctima de discriminación laboral, en el caso concreto de los transexuales la cifra aumenta considerablemente, hasta un 40%. Así lo ha revelado una encuesta publicada por la organización Make the Road New York que trabaja en defensa de los derechos de los homosexuales y los inmigrantes.
CARLA GÓMEZ. CÁSCARA AMARGA.- Karina Claudio, una de las supervisoras del informe, ha explicado que es frecuente que los homosexuales sufran acoso laboral en Nueva York y que en el caso de los transexuales, este problema se agrava hasta el punto de que muchas veces ni siquiera logran acceder a las entrevistas de trabajo «aunque estén cualificados». Para elaborar este informe, cuyo propósito era analizar el nivel de discriminación laboral según orientación sexual, la organización ha entrevistado a 250 LGTB y a 100 heterosexuales. La conclusión ha sido que mientras dos tercios de los heterosexuales entrevistados y la mitad de los homosexuales tienen trabajo, sólo un 46% de las personas transexuales cuenta con un empleo, a pesar de que el 43% de ellos lo está buscando.
Otro de los miembros de la organización Make the Road New York, una mujer transexual mexicana llamada Joselyn Mendoza ha contado que antes de su operación trabajaba en un bar del barrio neoyorkino de Brooklyn pero fue inmediatamente despedida en cuando decidió someterse a la cirugía de reconstrucción genital. «Después de dos años trabajando en el mismo bar decidí cambiarme de sexo. Cuando las hormonas empezaron a cambiar mi apariencia física mi jefe me dijo que me tomara un mes de vacaciones y ya no pude volver a trabajar en el bar», explica Joselyn, que tras el incidente laboral nunca más ha reconocido su condición de transexual en ninguna entrevista de trabajo por miedo a no ser contratada. El caso de Joselyn no es el único caso de discriminación laboral que se conoce, ya que un 32% de los transexuales han sido despedidos de sus trabajos debido a su identidad sexual. A este 32% de despidos se suma un 44% de transexuales que se han visto forzados a abandonar ellos mismos su puesto de trabajo a causa de la discriminación y acoso sufrido.
«Creía que en Estados Unidos había libertad y que podía expresarme tal y como soy. Sin embargo, cuando tuve una entrevista de trabajo y no les gusté debido a que mi apariencia física no coincidía con el nombre de mi documento de identidad, me di cuenta de que el país no era tan libre como pensaba», estas son palabras de Diana Flores, otra transexual mexicana residente en Nueva York a la que han negado el acceso a puestos de trabajo debido a su identidad sexual.
Karina Claudio ha aprovechado la publicación de este informe para hacer un llamamiento al Gobierno para que se apruebe la ley de No Discriminación a la Expresión de Género (GENDA) en la próxima sesión legislativa, alegando que es vital para que los transexuales tengan las mismas oportunidades que el resto. La supervisora del informe también ha destacado la importancia de que se apruebe la ley de No Discriminación en el Trabajo (ENDA), ley que establece las bases para que nadie sea discriminado por cuestiones de orientación o identidad sexual. La última de las peticiones que
Karina ha hecho se refiere a la educación, solicitando que en los colegios públicos de Nueva York se incluyan recursos pedagógicos sobre orientación sexual y respeto «como única forma» para acabar con la discriminación.
Por su parte, un portavoz de Carlos Mancheca, el primer gay mexicano candidato a concejal en Nueva York, ha subrayado que este informe no muestra otra cosa que la necesidad de leyes, tanto a nivel estatal como federal, que protejan a los trabajadores transexuales para que «no se abuse de ellos».