Los chicos, de unos 12 años, apedrean a la mujer cuando da de comer a gatos callejeros.
CARMELO CONVAIA. EL DIARIO DE IBIZA.- La asociación protectora de animales Acción Francisco Formentera ha hecho público el acoso que sufre una de sus voluntarias, de más edad, cuando va a alimentar a los gatos a la caseta comedero de Sant Francesc. Los supuestos autores son tres menores (de alrededor de 12 años) que acosan, incluso tirando piedras, a esta mujer de avanzada edad, nacionalidad británica y residente en la isla desde los años sesenta. Tiene 80 años y desde hace décadas se dedica a cuidar de los gatos de Sant Francesc, pero ahora es socia de Acción Francisco y colabora con sus iniciativas.
Esta asociación ha montado un total de siete casetas comederos en la Savina y en Sant Francesc, con la autorización del Consell Insular, para evitar a dispersión de estos animales a la vez que realizan un control sanitario y campañas de castración, creando colonias de felinos que son mucho más controlables. La asociación calcula que en Formentera debe haber, en estos momentos, unos 700 gatos en libertad.
En Sant Francesc el comedero se sitúa en un terreno de la parroquia, que autorizó su montaje, detrás del Ayuntamiento viejo y al lado de la iglesia.
La presidenta de la asociación, Alicia Pascua, explicó que el pasado 10 de noviembre se prendió fuego a la caseta-comedero montada en esta localidad, que ya ha sido repuesta. Pero detalla que desde entonces y en lo que va del mes de enero, estos «tres preadolescentes de alrededor de 12 años, se han dedicado a perseguir con piedras y petardos a los gatos de las colonias, actos que lamentamos». Pero ahora les preocupa especialmente el acoso que ha sufrido esta anciana, ya que a pesar de haber puesto los hechos en conocimiento de la Guardia Civil y de la Policía Local, estos comportamientos han continuado.
Pascua asegura que ha sido «raro el día en que esta voluntaria no se ha encontrado con ellos y no la hayan insultado o tirado alguna piedra». Aunque en ningún momento le han producido heridas o lesiones: «lo que han hecho ha sido asustarla, de tal forma que siente miedo», subraya Pascua. A partir de ahora siempre irá acompañada de otro voluntario.
Acción Francisco asegura que lo sucedido «no es la primera vez que ocurre. Nos entristece profundamente, estos tres preadolescentes apedreando a una mujer de 80 años que alimenta a estas colonias de gatos; nos parece descorazonador, por favor, no queremos que una ‘trastada’ o ‘gamberrada’ se convierta en un delito de agresión».
Ayer por la mañana la madre de uno de los niños, pidiendo el anonimato, envió un mensaje a Radio Illa en el que aseguró sentirse «avergonzada» y explicó que había ido con su hijo a la Policía Local, al descubrir su conducta, que desconocía. También pidió perdón y aseguró haber tomado medidas con su hijo, que mantendrá para evitar este comportamiento.
