EUROPA PRESS.- «El peligro ahora es que la extrema derecha está entre nosotros», ha manifestado el cineasta alemán Fatih Akin este miércoles en Madrid durante la rueda de prensa de presentación de su película ‘En la sombra’, protagonizada por Diane Kruger y que se estrena este viernes en los cines españoles.
Durante la presentación, el director de ‘Contra la pared’ (2004) y ‘Al otro lado’ (2007) ha advertido acerca del auge del racismo y de las actitudes ultraderechistas que, mientras que «antes era muy difícil saber dónde estaban», puesto que se encontraban «en los bordes» y en los «límites», ahora están «en el centro».
Akin (Hamburgo, 1973), de ascendencia turca, ha advertido que ahora ya no hay «estereotipos» y que una actitud neonazi puede esconderse tras «el banquero, el político o el taxista» porque «ya no es algo anecdótico», tal y como ha lamentado.
‘En la sombra’ está inspirada en hechos reales que ocurrieron entre 2000 y 2007 y narra la experiencia traumática de Katja, cuya vida se derrumba cuando su marido y su hijo mueren en un atentado. A partir de ese momento, tratará junto a su abogado Danilo de conseguir que se haga justicia, tras la detención de dos jóvenes relacionados con el movimiento neonazi.
El cineasta, que comenzó su carrera cinematográfica a mediados de los 90, ha reconocido que lleva mucho tiempo con la idea de rodar una película sobre el racismo, pero ha esperado a sentir que tenía la suficiente «madurez» para abordarla, a pesar de contar con experiencias cercanas, como la de un conocido de su hermano que fue tiroteado.
«Intento mostrar que la violencia está incrementándose y está cerca de todos, pero también que la violencia produce falta de control y que es una respuesta que no lleva a nada», ha resaltado. ASOMBRO, IRA Y SOLEDAD
En cuanto a la elección de Diane Kruger para el papel principal, ha señalado que antes de terminar el guion ella ya estaba en el proyecto, aunque para las primeras ideas se inspiró en las madres a las que veía en el parque cuando acompañaba a sus hijos a jugar.
Estilísticamente, Akin ha señalado que se ha enfrentado a «los colores del dolor», que está compuesto por «asombro, ira, desproporción y soledad». «Al ser padre pude meterme en el personaje, no ha sido tan difícil de imaginar las imágenes», ha señalado.
En este sentido, ha confesado que siempre huye de etiquetas que lo encasilles en el «estilo Fatih», algo que detesta, según ha señalado, porque prefiere adaptarse a la historia en la cada película, «al igual que hacía David Bowie en sus discos». En este caso, ha priorizado la actuación, en los que se ha concentrado para dar libertad a la cámara.
En cuanto a la banda sonora, Akin ha explicado que encargó la música a Josh Homme, líder de Queens of the Stone Age, porque reúne «agresividad y melancolía».
