LA VANGUARDIA. EFE.- El juzgado de instrucción 11 de Sevilla investiga la denuncia por un delito de odio presentada por un homosexual contra un hombre que presuntamente le amenazó y agredió por su orientación sexual en una farmacia, denuncia a la que se ha sumado como acusación popular la asociación Adriano Antinoo.
Según la denuncia y el escrito de personación a los que ha tenido acceso Efe, los hechos sucedieron el pasado abril cuando el denunciante, R.A.R., entró en una farmacia en el centro de Sevilla junto a un local de ambiente homosexual de la ciudad para comprar «valium y aspirina» con receta electrónica y la farmacéutica se negó a dispensárselo, ante lo cual el denunciante le recriminó que tenía obligación de atenderle al ser un servicio público.
Según la denuncia, ampliada en mayo con los partes de la atención sanitaria recibida por el denunciante, «en ese momento, de la parte detrás del mostrador, salió quien al parecer es el marido de la farmacéutica y le dijo: Sal a la calle que te voy a partir la cara maricón».
Ante el temor a una agresión, el denunciante salió de la farmacia para coger una bici del servicio municipal de alquiler si bien el denunciado, M.I.C.B., siguió increpándole aludiendo a su orientación sexual y salió tras él «siendo alcanzado y agarrado y lanzado de la bicicleta fuertemente para chocar contra un bolardo de la acera al caer» e incluso estando en el suelo, el denunciado «aprovechó para patearlo en la cara y el cuerpo».
En la denuncia consta que R.A.R. aporta la grabación de un móvil con su vídeo de las amenazas y la agresión que atribuye a un «delito de odio ya que no le quisieron atender en la farmacia por homosexual, demostrado por los insultos grabados en el vídeo cuando lo agredió este individuo».
Según los partes médicos, el denunciante tuvo que ser atendido en un centro de salud de urgencias por «contusiones múltiples» en la cara y el costado derecho y ataque de ansiedad, por lo que estuvo en tratamiento y de baja laboral durante tres meses.
Además, denunció daños durante la agresión en su ordenador portátil y su móvil por valor de mil euros.
Por todo ello, el juzgado de instrucción 11 de Sevilla ha abierto diligencias previas para investigar un posible delito de lesiones y de odio, diligencias en las que a finales de julio se ha personado como acusación popular la asociación Adriano Antinoo, personación que ha sido admitida recientemente.
La titular del juzgado ha rechazado dictar como medida cautelar una orden de alejamiento solicitado por el denunciante mientras continúa la investigación de los hechos.
