CARLOS HIDALGO. ABC.- La Policía Nacional ha detenido a una profesora de instituto acusada de delitos de odio y contra la integridad moral de doce de sus alumnos, menores de edad. La docente, presuntamente, llevaba todo el curso que ahora termina profiriendo durísimos insultos contra los chavales, incluido a uno que padece una discapacidad y es de origen colombiano; contra este último, además, utilizaba términos xenófobos. El director y el jefe de estudios eran conocedores de lo que ocurría.
La comisaría de Centro, que es la que ha desarrollado la investigación, tuvo la primera noticia de lo que estaba ocurriendo el pasado 6 de junio. Uno de los alumnos se presentó en las dependencias policiales con su padre. Se trata del menor de 16 años colombiano y con un grado de discapacidad física del 37%. Expuso que su profesora de Matemáticas, Adela G. L., de 45 años, no paraba de insultarle a él y a sus otros once compañeros de pupitre con expresiones del tipo: «¡Hijos de puta! Estáis fatal. No sé para qué estudiáis. ¡Sois unos desequilibrados mentales!». El trato vejatorio, según la investigación, era constante.
Según relataron, habían decidido interponer la denuncia después de enviar varios escritos sobre el asunto a la dirección del centro, el IES Santa Teresa de Jesús (situado en la calle del Fomento, 9), sin que hubieran cursado respuesta.
Los funcionarios policiales citaron en comisaría tanto al director como al jefe de estudios para conocer su versión de los hechos. El primero de ellos reconoció que sabía los problemas de la profesora con sus estudiantes. Había recibido las quejas de los doce alumnos y sus padres y había abierto tres procedimientos por faltas leves contra la docente, de los que habían dado cuenta a la Dirección Territorial de Educación de la Comunidad de Madrid. El jefe de estudios, en su declaración, corroboró que había sido informado de numerosas quejas al respecto.
La Policía Nacional también pidió a los doce alumnos que acudieran a las dependencias de Leganitos. Allí, uno por uno, los adolescentes corroboraron el maltrato verbal que recibían por parte de la profesora de Matemáticas. Una estudiante narró cómo la llamaba «loca» e incluso que en cuatro ocasiones la zarandeó y le tiró del brazo. En una de las clases, se acercó a ella y le tiró sus objetos personales al suelo, precisó la menor. Era común, siempre según la versión de los denunciantes, que Adela vociferara: «¡Es un aula de tontos!». A otra alumna le espetó: «Eres una hija de puta, eres tonta y no vas a ser nada en la vida. Eres una antisistema». A otro menor también lo calificó de «antisistema» y de «porrero y drogadicto»: «En tu casa no te han educado bien», añadió.
Según fuentes policiales, el trato más vejatorio lo sufrió el chaval que interpuso la primera denuncia. Su madre había fallecido una semana antes cuando le gritó, textualmente: «Tu madre murió porque era una drogadicta. Lo que tienes que hacer es estudiar más y olvidarte de la muerte de tu madre». Además, por ser latino, el chiquillo era objeto de insultos xenófobos, de ahí que a la profesora se la acuse de un delito de odio.
Problemas mentales
Habiendo realizado todas las pesquisas necesarias, los policías de Centro acudieron a Pozuelo de Alarcón, localidad donde reside la encartada, para detenerla. Aún deparaba más sorpresas. Porque, cuando fue trasladada a esa comisaría, los funcionarios que trabajan en ella refirieron a sus compañeros de Leganitos que la conocían por los enfrentamientos que mantenía con su comunidad de vecinos. De hecho, la pareja sentimental de Adela reconoció a los agentes que sufre un trastorno mental y que no se tomaba la medicación.
La mujer llevaba un curso en el IES Santa Teresa de Jesús y ha cursado estudios en la Escuela de Ingeniería Técnica Agrícola de la Universidad Politécnica de Madrid. Antes, ha pasado por un instituto de Parla y por otro de San Pablo-CEU en Boadilla del Monte.