El partido entre el Atlético Unión Güímar y el Unión Deportiva Icodense en el Estadio Municipal Tasagaya terminó en una gran batalla campal
LA OPINIÓN.- El partido entre el Atlético Unión Güímar y el Unión Deportiva Icodense, equipos de la Liga Regional Preferente, terminó en una nueva muestra de violencia deportiva en el Estadio Municipal Tasagaya, en Güímar. Tal y como informa Radio Marca Tenerife, al finalizar el encuentro, un encapuchado saltó de la grada junto a otro joven con el fin de agreder a diferentes futbolistas del choque que vestían los colores del equipo local.
Según apuntan, el encapuchado es un jugador del Icodense que lleva varios partidos de sanción por agredir a un árbitro,y que se encontraba viendo el partido desde la grada. Tras saltar al campo, fue directo hacia un jugador del conjunto de Tasagaya, dando inicio así a la batalla campal.
Radio Marca Tenerife indica que diferentes testigos del choque aseguran que parar al jugador del Icodense «era complicado» y que fue necesaria la intervención de once policías para detenerlo y llevarlo a comisaría. Asimismo, afirman que tras el salto del encapuchado al campo, «la diretiva del Icodense se metió en el campo a agreder a varios jugadores y un directivo del club visitante le pegó al preparador fisico del Güímar».
Las imágenes del vídeo de la disputa muestran, una vez más, el triste y lamentable lado del deporte.