La Delegación del Gobierno y el Real Madrid preparan con todo detalle el dispositivo de seguridad
RUBEN CAÑIZARES. ABC.- El próximo martes será un día de alerta máxima en la capital de España, sobre todo en las zonas de ocio cercanas al Santiago Bernabéu y en la zona centro (Puerta del Sol y Plaza Mayor). Está previsto que alrededor de cuatro mil aficionados del Legia de Varsovia acudan aMadrid para vivir in situ el encuentro entre blancos y polacos, correspondiente a la tercera jornada de la fase de grupos de laChampions. Un multitudinario desembarco que provocará unas medidas especiales, teniendo en cuenta el violento patrón de comportamiento de los ultras del Legia, unos de los grupo radicales de aficionados más peligrosos del mundo.
«Hay mucha preocupación por este asunto. Normalmente, el dispositivo de seguridad ante un partido de alto riesgo se cierra en una reunión previa que se celebra cuatro o cinco días antes del encuentro. En este caso, el Real Madrid y la Delegación del Gobierno llevan ya dos semanas hablando sobre el duelo ante el Legia», desvela a ABC fuentes del organismo gubernamental.
Hasta el próximo lunes, cuando el Legia ya haya comunicado oficialmente al Real Madrid el número exacto de aficionados que viajan y con cuántos y quiénes de ellos habrá que tener una extrema precaución, no se establecerá el número definitivo del dispositivo de seguridad, pero sobre la mesa está la idea de ampliar la habitual cantidad de 1.000 personas, entre policía nacional, municipal, antidisturbios, personas del Samur, bomberos y voluntarios.
Para el desfile de las Fuerzas Armadas del pasado miércoles, 1.500 personas velaron por la seguridad para que todo http://comprar-ed.com/levitra.html transcurriera con normalidad, una cifra que se ha llegado a valorar en las reuniones que han mantenido el Real Madrid y la Delegación del Gobierno y que escenifica con claridad la importancia del asunto. A este dispositivo habrá que añadirle, entre auxiliares y vigilantes, otras 600 personas más provenientes de la seguridad privada del club blanco y el número de policía polacos que vengan desde Varsovia ex profeso para el partido en el Bernabéu.
Racistas y homófobos
Encabezados por el grupo «Teddy Boys 95», que dirige Piotr Cern, más conocido por «Staruch», un feroz líder que dirige a sus secuaces como un auténtico capo de la mafia, los ultras del Legia son considerados una banda criminal de extrema derecha, racista y homófoba. En su hoja de servicios acumulan una larga lista de batallas callejeras, tanto en su país como fuera de sus fronteras. Sin ir muy lejos, el pasado mes de diciembre, en Nápoles, en un partido de Europa League, convirtieron la ciudad del sur de Italia en una urbe de horror y pánico al enfrentarse con extrema violencia a los hinchas locales.
Aunque su último gran escándalo lo protagonizaron en septiembre, en el primer partido de Champions, disputado ante el Dortmund, en el que hicieron de su fondo un mosaico de bengalas y atacaron a los «stewards» con gases lacrimógenos. Aquello le ha costado el cierre de su estadio contra el Real Madrid el próximo 2 de noviembre: «El control será exhaustivo para evitar que puedan meter bengalas en el Bernabéu. Es uno de los temas que más nos tiene en alerta», subraya la Delegación de Gobierno.