El país registra más de 1.400 actos violentos de la extrema derecha contra inmigrantes
ENRIQUE MÜLLER. EL PAÍS.- La violencia xenófoba ha aumentado en Alemania. Un informe que dio a conocer este miércoles el Gobierno detalla que en 2015, coincidiendo con el acogimiento masivo de refugiados que hizo el país, se registraron más de 1.400 actos violentos contra inmigrantes protagonizados por militantes de grupos de la ultraderecha, un 42 por ciento más que en 2014.
El documento hace hincapié en la zona más afectada, el este de Alemania. Casi 26 años después de la unificación el informe destaca que la xenofobia y las actividades extremistas de los movimientos radicales pueden poner en peligro la paz social de esa zona, que sufre más desempleo y despoblación que el resto de la nación.
El documento señala que los cinco estados que pertenecían a la RDA corren el riesgo de dilapidar todas las expectativas de convertirse en una región abierta al mundo y con grandes posibilidades de prosperar a causa del odio hacia los extranjeros que ha echado raíces en la región. Aquí la ultraderecha se ha movilizado, muchas veces con violencia, contra la llegada de inmigrantes.
«El extremismo de derecha en todas sus formas constituye una serie amenaza para esta región», dijo la comisionada gubernamental para los nuevos estados federados, Iris Gleicke. «Una acción decidida por parte del gobierno, los estados, los municipios y la sociedad civil es necesaria para garantizar la paz social en el este de Alemania», añadió.
Los informes anteriores sobre el estado de salud de la nación unificada habían puesto énfasis en la regeneración industrial en los nuevos estados, un aspecto crucial que se produjo a causa de la grave crisis económica que vivió la región después de la unificación. El desempleo llegó a casi a un 20%, la gran industria de la RDA fue desmantelada y la región logro superar la crisis gracias al impuesto de la solidaridad, que entró en vigor en 1992 y que aún sigue vigente.
Pero el aumento de la xenofobia, una lacra que siempre ha existido en el país, pero que estalló en 2015 después de que más de un millón de inmigrantes, la mayoría musulmanes procedentes de Oriente Medio, África y Asia, accediera al país, se ha convertido en el tema central del informe de este año.
El documento menciona que existe una “evolución preocupante” y cita las violentas manifestaciones xenófobas que se registraron en las ciudades de Heidenau y Freital, dos pequeñas ciudades en el estado de Sajonia y que se convirtieron en un nuevo símbolo de la xenofobia del este. El informe detalla que los extremistas protagonizaron 75 atentados en contra de centros de acogida para refugiados durante el año pasado..
Las estadísticas en poder de la Oficina Federal de Protección de la Constitución indican que, desde hace años, la relación entre actos violentos xenófobos y el número de habitantes es mucho mayor en el este, que en el rico occidente del país, donde por cada millón de habitantes se cometieron 10,5 actos violentos en 2015. En cambio, en el pequeño estado federado de Mecklenburgo Pomerania Occidental, donde hace dos semanas el partido xenófobo, Alternativa para Alemania, se convirtió en la segunda fuerza política, por encima de la CDU, la relación fue de 58.7 actos violentos.
“Estoy preocupada por este creciente aumento de la violencia de la ultraderecha y xenófoba. Los ataques y la violencia están respaldados por el silencio o aceptados por la sociedad en general”, dijo la comisionada, al recordar que la violencia xenófoba ha dañado la imagen de Alemania en el exterior.