BEATRIZ GUILLÉN / FRANCISCO J. BARROSO. EL PAÍS.- La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena (Ahora Madrid), no se reunirá con los integrantes del grupo Hogar Social Madrid. La regidora ha rectificado en cuestión de cuatro horas y ha anunciado que no aceptará a ninguna persona integrante de este grupo en la reunión que tiene prevista para el próximo 26 de noviembre. El equipo municipal ha aclarado que Carmena «no se reunirá con colectivos que no respeten los derechos humanos e inciten a la violencia», según un comunicado municipal.
Veinte okupas neonazis del Hogar Social Madrid, acompañados por cinco personas sin hogar, han entrado este jueves alrededor de las doce de la mañana en el hall principal del Ayuntamiento de Madrid y han realizado una sentada con el objetivo de conseguir una reunión con la alcaldesa. Manuela Carmena había accedido y les había concedido una cita para el 26 de noviembre.
Los okupas han pasado el control de accesos de la entrada de Centro Centro en el Palacio de Cibeles como cualquier otro visitante, según informan fuentes de seguridad. El motivo de la protesta ha sido que Manuela Carmena (Ahora Madrid) había cancelado la cita que tenía con ellos para este jueves. «Hace unos días llamé a una asesora del Ayuntamiento y me comunicó que la alcaldesa tenía la agenda muy apretada y no iba a ser posible», cuenta Melissa, la portavoz de Hogar Social.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena (Ahora Madrid), no se reunirá con los integrantes del grupo Hogar Social Madrid. La regidora ha rectificado en cuestión de cuatro horas y ha anunciado que no aceptará a ninguna persona integrante de este grupo en la reunión que tiene prevista para el próximo 26 de noviembre. El equipo municipal ha aclarado que Carmena «no se reunirá con colectivos que no respeten los derechos humanos e inciten a la violencia», según un comunicado municipal.
Veinte okupas neonazis del Hogar Social Madrid, acompañados por cinco personas sin hogar, han entrado este jueves alrededor de las doce de la mañana en el hall principal del Ayuntamiento de Madrid y han realizado una sentada con el objetivo de conseguir una reunión con la alcaldesa. Manuela Carmena había accedido y les había concedido una cita para el 26 de noviembre.
Los okupas han pasado el control de accesos de la entrada de Centro Centro en el Palacio de Cibeles como cualquier otro visitante, según informan fuentes de seguridad. El motivo de la protesta ha sido que Manuela Carmena (Ahora Madrid) había cancelado la cita que tenía con ellos para este jueves. «Hace unos días llamé a una asesora del Ayuntamiento y me comunicó que la alcaldesa tenía la agenda muy apretada y no iba a ser posible», cuenta Melissa, la portavoz de Hogar Social.
Han estado dentro del edificio cerca de una hora de forma pacífica: «Han estado ahí sentados quietos y han hecho sus cánticos», explican las mismas fuentes. Han abandonado voluntariamente el Ayuntamiento cuando ha bajado un miembro del equipo municipal y ha concertado una nueva cita con Carmena para el 26 de noviembre. «Había dos opciones: salir con una reunión en la mano o que la policía nos echara por la fuerza», explica Melissa, que añade que no ha hecho falta porque les han dado la cita como la querían. «Solo la aceptábamos si era por escrito».
El Ayuntamiento ha emitido un comunicado pasadas las seis de la tarde en la que señala que, aunque la cita de esta mañana se había dado nominalmente a la portavoz de Hogar Social Madrid, no se permitirá la entrada a personas pertenecientes a este grupo en el encuentro previsto para el próximo 26 de noviembre. A la cita tan solo acudirán personas con riesgo o en desamparo, a las que se les ofrecerá, según fuentes municipales, alternativas de apoyo social. Algunas de estas personas son las que acompañaban esta mañana al grupo de Hogar Social Madrid.
El propósito de la reunión con la alcaldesa era pedirle un local similar al que tiene el Patio Maravillas, según Hogar Social Madrid. «Queremos presentarle nuestro proyecto para que nos ceda un espacio público donde desarrollar nuestras actividades», informa Melissa, «queremos conocer cuáles son los parámetros que rigen la concesión de un loca: si es por labor social o por ideología». Los componentes del Hogar Social afirman que ellos también tienen una función social al dar alojamiento y alimentación a personas sin hogar, repartir comida a 300 familias necesitadas o dar clases particulares a niños sin recursos.
Esta mañana en las redes sociales, diversos colectivos y usuarios recogían bajo el hashtag #ManuelaNoTeReúnasConNazis la petición a la alcaldesa para que no accediera a su reunión con este grupo. La portavoz del Ayuntamiento, Rita Maestre, ha comentado que el Ayuntamiento está «dispuesto a dialogar con todos los grupos por diferentes que sean sus ideas» con respecto a las del Gobierno municipal.
Justo cuatro horas más tarde, el Ayuntamiento ha difundido el comunicado de prensa en el que acusa a Hogar Social Madrid de ser» un grupo de clara ideología nazi y de conductas violentas que rebasan cualquier línea roja de respeto a los derechos humanos». También le vincula con el partido extinto Movimiento Social Republicano (MSR) y grupos también violentos como los Ultra Sur y el Frente Atlético (seguidores del Real Madrid y del Atlético de Madrid, respectivamente). «Ninguna institución democrática se relaciona en términos de reconocimiento con colectivos que vulneren los derechos humanos y atenten contra la dignidad de las personas», concluye el comunicado.