La delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, impulsa un plan para ayudar a denunciar las agresiones sufridas por homosexuales
PATRICIA ORTEGA DOLZ. EL PAÍS.- Habrá trípticos y carteles en las comisarias, policías especializados y mediadores, charlas educativas de agentes en colegios, toda una campaña informativa para ayudar a los homosexuales a denunciar las agresiones homófobas que, según señaló ayer la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, se han incrementado en los últimos tiempos en la región. “El número de denuncias registradas en relación con los delitos vinculados a la orientación o identidad sexual pasaron de 12 en 2013 a 21 hasta finales de 2014”.
En una reunión con los colectivos de gais y lesbianas se concretaron las medidas a poner en marcha para incidir en el principal foco del problema: las víctimas no denuncian por miedo. “Miedo a que se tomen represalias, miedo a no ser protegidas, miedo a sentirse incomprendidas…”, señalaba uno de los portavoces de COGAM, el colectivo de gais y lesbianas de Madrid. Y aportaba un dato: “Solo el 11% denuncia”. A ese temor se suma la clandestinidad —personal o familiar— en la que muchos de ellos continúan viviendo su orientación sexual.
El comisario de Getafe, José Ramón Murillo, ejercerá de mediador e interlocutor de este nuevo protocolo, por haber sido valorada por los colectivos gais la experiencia en esa comisaría “como un ejemplo de buenas prácticas”. Y las investigaciones las seguirá llevando la Brigada Provincial de Información.
En el encuentro se analizó con especial atención la situación de la comisaría de Centro, al ser la que recoge la mayor parte de las denuncias de homofobia que se presentan en Madrid. El objetivo es “mejorar los protocolos de atención, mediante la especialización de los agentes”.
Paralelamente, se acordó hacer hincapié en la prevención de las conductas homófobas, desde edades tempranas, a través de charlas informativas impartidas por Policía Nacional y Guardia Civil en el marco del Plan Director para la Convivencia Escolar.
Los trípticos informativos se editarán en papel, y se imprimirán también en tamaño cartel, para su difusión en todas las comisarías de la Policía Nacional y cuarteles de la Guardia Civil. Incluirán consejos para identificar un delito de odio, e invitarán a las víctimas a poner los hechos en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Por último, el protocolo de actuación presta especial atención a una tipología delictiva emergente, como es el ciberodio, consistente en la utilización de las redes para diseminar mensajes o informaciones antisemitas, xenófobas, homófobas, racistas, intolerantes o extremistas, entre otras.